La proporción de mujeres que declararon efectos secundarios tras recibir su primera, segunda o tercera dosis de la vacuna de Pfizer es casi el doble (1,9 veces) que entre los hombres, según un nuevo estudio realizado en la Escuela de Salud Pública de la Universidad de Haifa (Israel) y publicado en la revista 'Vaccines'.

"No sabemos qué mecanismo está implicado, pero puede estar relacionado con las diferencias entre los sexos en el sistema inmunitario o en la percepción de los efectos secundarios", ha comentado el profesor Manfred Green, investigador principal del estudio, que explica que una posibilidad es que el sistema inmunitario de las mujeres "responda con más fuerza que el de los hombres a los antígenos extraños".

Las vacunas de Pfizer se basan en la inyección de un ácido nucleico (ARNm) que codifica una de las proteínas del virus. El objetivo es estimular la producción de anticuerpos contra el virus y proteger al receptor contra la enfermedad.

La vacunación se acompaña a veces de efectos secundarios, que se manifiestan, por ejemplo, en dolor en el punto de vacunación o en todo el brazo, fiebre, debilidad, fatiga y parestesias en diversas partes del cuerpo. Los investigadores examinaron las diferencias entre hombres y mujeres en la notificación de efectos secundarios tras recibir las vacunas de Pfizer en Israel.

Así, el estudio se basó en la recopilación de datos de cuatro fuentes diferentes: los informes enviados al Ministerio de Salud sobre los efectos secundarios en individuos mayores de 16 años durante el período comprendido entre diciembre de 2019 y junio de 2021; una encuesta de 923 participantes mayores de 30 años realizada en junio de 2021; y dos encuestas adicionales con 560 participantes de 20 a 65 años realizadas en lugares de trabajo en septiembre de 2021.

Los resultados del estudio muestran que la notificación de efectos secundarios tras la primera, segunda y tercera vacunación es aproximadamente 1,9 veces mayor entre las mujeres que entre los hombres.

Más efectos tras la segunda

Las frecuencias más altas de efectos secundarios notificadas entre todos los participantes fueron las que se produjeron tras la segunda vacunación. Los efectos secundarios fueron generalmente leves, incluyendo dolor en el punto de vacunación, fiebre, dolores de cabeza, debilidad y parestesia en el brazo.

Un análisis de los resultados muestra que la proporción de mujeres que declararon dolor en todo el brazo tras recibir la vacuna fue 7 veces mayor que entre los hombres tras la primera vacunación y 4,2 veces mayor que entre los hombres tras la segunda vacunación; la proporción de mujeres que sufrieron este efecto secundario tras la tercera vacunación fue 4,1 veces mayor que entre los hombres.

Además, la proporción de mujeres que declararon debilidad fue 30 veces mayor que la de los hombres después de la primera dosis; 2,6 veces mayor después de la segunda dosis y 1,6 veces mayor después de la tercera.

Asimismo, la cantidad de mujeres que sufrieron dolores de cabeza también fue 9 veces mayor que entre los hombres después de la primera dosis, 3,2 veces mayor después de la segunda dosis y 2,45 veces mayor después de la tercera dosis. Según los investigadores, los resultados del estudio subrayan la necesidad de informar sobre los efectos secundarios de las vacunas desglosados por género.