Ya no hay excusas. Han pasado las navidades y con el nuevo año es el momento de marcar un punto de inflexión para no seguir una alimentación saludable y volver a la rutina. Aunque al principio puede costar un poco volver a adentrarse en el mundo healthy y retomar costumbres sanas para nuestro organismo. Ahora sin duda, la gran tendencia en este mundo de la alimentación saludable son los superalimentos.

Cada vez más en auge y no es para menos. Estos productos suman adeptos día tras día porque son muy beneficiosos para el organismo. En esencia, son alimentos cuyo valor nutricional los convierte en comestibles muy interesantes por su alto contenido en antioxidantes, vitaminas o grasas saludables. Todos ellos se encuentran principalmente en la naturaleza y gracias a su composición basta una pequeña porción de ellos para aportar a nuestro cuerpo una gran cantidad de nutrientes esenciales y con múltiples propiedades. Además de ser un chute de beneficios para el cuerpo, la mayoría son muy fáciles de encontrar en cualquier supermercado y muy económicos, aunque hay algunos muy exóticos y poco conocidos en España.

Hay superalimentos mucho más comunes en nuestra dieta, como el plátano, la granada, el aloe vera, las nueces, las espinacas, la canela, la coliflor, el salmón y el yogur, mientras que otros empiezan a hacerse un hueco en nuestras recetas y su origen es más desconocido, y que pueden encontrarse a través de tiendas especializadas.

El quimbombó es otro de los superalimentos que deberías empezar a tener en cuenta si todavía no lo incluyes en tus recetas. Aunque aún es un gran desconocido en Europa, este producto es muy consumido en África, Asia y América. Esta hortaliza de vaina verde se parece al pimiento, pero con un sabor y textura distintos, y guarda en su interior unas semillas que son las que le aportan su punto fuerte: una textura particular repleta de nutrientes con muy pocas calorías. Se puede tomar cocida, frita, asada o en guisos y sopas y en salteado.

Un superalimento muy completo

¿Beneficios? Son muchos. Entre ellos siempre en este tipo de alimentación destaca el tema de adelgazar. En este sentido, contiene una gran cantidad de fibra, lo que además de favorecer la digestión y evitar el picar entre horas por su poder saciante, ayuda a mantener o bajar el peso y evita problemas estomacales como úlceras o gastritis.

También es una ayuda contra el cansancio. Las semillas que contiene el quimbombó están repletas de nutrientes que hacen que consumir esta verdura favorezca una recuperación más rápida después de realizar ejercicio y también aporta un chute de propiedades que combate el cansancio en el cuerpo. El quimbombó es un gran aliado para mantener los niveles de azúcar en sangre gracias a la fibra salubre que posee, que la convierte en un producto recomendable para diabéticos.

Además, este superalimento contiene mucílago, una sustancia con un potente efecto beneficioso: contrarrestar el colesterol. Se encarga de que el colesterol sea expulsado con las heces en lugar de ser absorbido por el organismo. Algo que unido a su alta cantidad de fibra lo convierte en una opción muy beneficiosa para personas con enfermedades cardíacas.