El Montpellier francés se hizo ayer con el galardón de bronce del Cotif Femenino al derrotar en el encuentro por el tercer y cuarto puesto al Valencia. Las galas no fueron superiores a las valencianas pero mostraron mayor acierto anotador, sobre todo en la primera mitad, que cerraron con un 2-0. Tras el descanso recortó distancias el conjunto de Cristian Toro pero ya no pudieron empatar.

Los primeros minutos fueron de las valencianistas, con mayor protagonismo en el control del balón y más presencia en el área rival. Sin embargo, Rumi Utsugi adelantó a las francesas con una internada entre la defensa che. El campeón de Francia demostró ser un conjunto compacto con criterio y verticalidad cuando pasa del medio campo. Tras una indefinición defensiva llegó el segundo tanto, justo antes del descanso.

Marcó Tonazzi para infringir un castigo excesivo. Sin embargo, recuperó interés el partido justo tras el paso por los vestuarios con un golazo de bandera de Georgina Carreras de falta directa, más o menos desde veinticinco metros. No obstante, después del excelso tanto, el balón se alejó de las inmediaciones de las porterías y el partido fue una batalla en el centro del campo. Carolina Férez tuvo el empate en sus botas tras escaparse de la defensa e intentar una vaselina que se escapó por poco.

Beristaín destacó en las valencianas por la banda derecha. La papeleta se le complicó un poco más al Valencia en el minuto 70 con la expulsión de Claudia Zornoza por roja directa tras una dura entrada. Fruto quizá de jugar en inferioridad numérica, las pupilas de Toro acabaron el partido más desgastadas físicamente y sin capacidad de reacción.