El Villarreal CF cosechó su primera derrota en el Cotif Promeses- Istobal. De ello se encargaron, sobre todo en la segunda parte, Rubén Bellot y Luisao Elizalde, que perforaron la portería del submarino en tres ocasiones, inutilizando así el gol inicial de Gerard López.

El primer acto, como en las últimas apariciones de los chicos dirigidos por Vicente Masià, fue cosa de puntería. Ni más, ni menos. Ambos conjuntos saltaron al verde con una consigna clara: buscar la espalda de los centrales, explotarla y registrarla a su nombre. Pese a ello, volvió a lucir la figura de los chicos del Villarreal, que estrenaron el luminoso a lo grande. Tras una jugada empezada por el meta y guionizada por Alejandro Pérez, el mejor director de juego posible, Gerard López no erró en el mano a mano.

El rol del partido dio un vuelco de 180 grados a favor del Mediterranean tras el descanso. Los pupilos de Nando Alama, que se desgañitó con las instrucciones ofensivas, encontraron la gran recompensa en forma de goles en el ecuador y final de la segunda parte. Primero desde el corazón del área y después desde una falta frontal, escorada de forma mínima a la banda derecha, el equipo valenciano logró remontar el duelo.