Un partido de juveniles en la provincia de Orense entre los equipos Velle B y Seixabalbo fue suspendido monetáneamente este fin de semana por el árbitro ante los insultos que estaba recibiendo desde la grada por parte del padre de un jugador local. El árbitro en el minuto 60 pitó y se marchó llorando a los vestuarios hasta que el padre que le estaba insultando fue expulsado del recinto y se reanudó el encuentro.
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El conjunto visitante fue el que denunció los hechos en una red social. "Esta mañana pasamos vergüenza en la visita al Velle contra el equipo juvenil. El árbitro, en el minuto 15 de la segunda parte, pitó el final del partido por los graves insultos que estaba recibiendo del padre de un jugador local (lamentablemente conocido ya por alguna situación parecida). Pena e impotencia ver llorando al colegiado en el vestuario tratando de ser consolado por representantes de ambos clubes. Rabia. Tristeza (...)".
