Este fin de semana han empezado las competiciones de fútbol 8 en la provincia de València a puerta cerrada. Las imágenes de los padres subidos a las vallas que delimitan los campos de fútbol para intentar ver a sus hijos jugando desde fuera de los recintos se están convirtiendo ya en casi normales a pesar de la petición de FFCV hace ahora una semana a la Consellería de Sanitat Universal y Salut Pública en la cual le pedía a la administración que reconsiderara su decisión de cerrar las puertas de los estadios a todo tipo de espectadores. De hecho, la noticia es que este martes está prevista una reunión física entre la consellera de Sanitat Ana Barceló y el presidente de FFCV Salvador Gomar para intentar alcanzar en un acuerdo.

El ente federativo ya puso en marcha la semana pasada una campaña bajo el lema 'Entramos seguros' en la cual quisieron dejar claro que hay más riesgo de contagio cuando los padres se agrupan en la cercanía de los recintos que cuando entran en los campos con medidas de seguridad como se hizo antes de la segunda oleada en la mayoría de campos de fútbol de la provincia, donde se tomaban datos de los asistentes, se dispensaba gel hidroalcohòlico, se obligaba el uso de mascarilla, se tomaba la temperatura de los espectadores e incluso se llegaron a utilizar aplicaciones digitales porque la gente se registrara y tenerla así controlada.