El centrocampista argentino Román Martínez reconoció en su presentación como nuevo jugador del Tenerife que cuando le comunicaron que era uno de los descartes del Espanyol se "amargó" pero que ya lo ha asumido y está "contento" por haber recalado en el conjunto chicharrero.

Román Martínez explicó que cuando comenzó la pretemporada "había la posibilidad" de encontrar un hueco en la plantilla del Espanyol pero que su condición de extra comunitario y la necesidad del equipo perico de reforzarse en otras demarcaciones forzaron su cesión.

Agradeció el interés que el Tenerife mostró desde un principio por hacerse con sus servicios y por eso garantizó: "daré todo por esta camiseta".

Román, cuarta incorporación a la plantilla que dirigirá un año más José Luis Oltra, se mostró dispuesto a "seguir creciendo" en esta nueva singladura en su carrera y garantizó su intención de adaptarse lo más rápido posible al vestuario y al estilo de juego de su nuevo equipo.

Román Martínez aseguró estar en buena forma física y confió en poder debutar mañana mismo en el amistoso que el Tenerife disputará contra el Marino, equipo del grupo canario de la Tercera División.

Se definió como un futbolista que tiene "un buen manejo del balón", que intenta "hacer jugar bien al equipo" y que suele "ayudar en tareas defensivas".

Preguntado por sus dotes goleadoras -marcó cinco tantos en Liga y dos en Copa con el Espanyol-, dijo que suele incorporarse al remate desde segunda línea y aunque "no es una de mis virtudes espero seguir este año igual", se comprometió. "Y si no, a ayudar a que los marquen los compañeros".

El medio argentino confirmó que por contrato no podrá medirse al Espanyol pese a que "tenía muchas ganas" y dejó por sentado que su periodo de adaptación al fútbol europeo ya quedó atrás.

En cuanto al nivel que tendrá la próxima edición de la Liga de Primera División recordó que ya el año pasado dijo que se trataba de "uno de los mejores campeonatos del mundo", y pese al poderío de los clubes más boyantes económicamente no cayó en el victimismo.

"Cada uno, con sus limitaciones, competirá de la mejor manera posible. En la cancha son once contra once y hasta que el árbitro no pite el final no hay nada seguro", sintetizó un Román Martínez que cree que la permanencia será el objetivo común de unos "quince equipos".

Por lo demás, dejó claro que le han llegado comentarios de cómo se vive el fútbol en la isla y la locura que se ha desatado en los últimos meses -"la cancha estará llena todo el año y eso motiva"-, y la tradición de futbolistas argentinos en el Tenerife.

"Por aquí han pasado grandes jugadores que fueron muy queridos por la afición. Ojalá siga por ese camino", deseó.