Después de disputar varios amistosos, llega la hora de la verdad para el Barça. El domingo en San Mamés se enfrentará a un Athletic que viene rodado tras haber jugado ya varios partidos oficiales de clasificación para la Europa League. Guardiola apostará por un once sin caras nuevas. Valdés en la portería, una línea de cuatro con Alves en el lateral derecho, Puyol y Piqué en el centro de la zaga y el francés Abidal en el lateral izquierdo, Maxwell esperará su oportunidad en el banquillo. Para la medular, Touré y Xavi son fijos y queda por ver quien ocupará la otra plaza, aunque por lo visto esta pretemporada Busquets sería el elegido. La tripleta atacante la formarán Messi, Bojan y Pedrito, ya que Henry sigue con molestias y es duda hasta el final. Además, el debut de Ibrahimovic no se producirá hasta el miércoles en el Trofeo Joan Gamper.

Por lo que se refiere al Athletic, Caparrós confiará en el once que derrotó al Young Boys en el partido de vuelta de la primera ronda de clasificación para la Europa League. La única duda será ver si el técnico le da una oportunidad al joven Muniain, de 16 años, después de que gracias a su gol los rojiblancos consiguieran el pase a la siguiente fase. De momento, tanto Barça como Athletic ya entrenan con la vista en el partido del domingo. Si bien Caparrós puede contar con todos sus hombres, incluido Susaeta, que se ha recuperado de su lesión, Guardiola en cambio, está en cuadro tras la desbanda de internacionales.

Partido distinto al de Copa

El partido del domingo será con total seguridad muy distinto al de la final de la Copa del Rey disputado en Mestalla el pasado mes de mayo. En aquel momento, ambos equipos llegaban con las pilas cargadas. El Athletic, con la ilusión de regalar a su afición un título que se le resistía desde hacía 25 años (ahora 26), y el Barça con el objetivo de conseguir el primer título de los tres a los que optaban. Ahora, la Supercopa llega en un momento en que ambos equipos siguen su puesta a punto de cara al inicio de la temporada regular. El hecho de que el Athletic ya haya jugado competición oficial puede suponer una ventaja para los ´leones´ pero la calidad de los jugadores del Barça equilibra la balanza.

No obstante, los hombres de Caparrós confían en ganar esta vez al Barcelona y así poder regalar un título a su afición. «Todos sabemos contra quien vamos a jugar y el nivel que tienen, pero esperemos que se note que hemos empezado antes y que hemos jugado ya partidos de competición oficial», destacó el rojiblanco Gurpegui.