Ernesto Valverde, entrenador del Villarreal, aseguró hoy, un día antes de enfrentarse al Salzburgo austríaco en la Liga Europa, que los pobres resultados que ha conseguido en el arranque de temporada el equipo no se corresponden con el juego practicado.

"Sabemos que ser penúltimos no es nuestra posición natural en la liga. Con el juego que estamos haciendo debemos estar más arriba. La cuestión es intentar acertar y crear fútbol necesario para hacer ocasiones y ganar, algo que sabemos que llegará algún día, pero queremos que sea cuanto antes y si es frente al Salzburgo, pues mucho mejor", dijo.

Valverde consideró que están en la zona baja de la clasificación de Liga tras los resultados de esta última semana, que calificó de "muy mala" al haber sufrido tres derrotas y que la presión que tienen es la que siempre existe en el fútbol por la necesidad de ganar.

Del rival de mañana comentó que han visto varios partidos de la liga austríaca, también alguno de la previa y el choque frente al Lazio de la primera jornada de la Liga Europa, además de apuntar que se trata de "un equipo acostumbrado a estar arriba en la clasificación, es primero de la liga y campeón del año pasado".

"En su liga se desenvuelve bien y con el Lazio se defendieron bien. En casa, tendrán la responsabilidad de buscar la victoria porque quien consiga ganar este choque sacará ya una ventaja importante con el resto a pesar de llevarse sólo dos jornadas", añadió.

También apuntó la habilidad del Salzburgo en el juego aéreo, por lo que cree que deberán "tener mucho ojo" con la estrategia "porque por arriba son muy peligrosos".

Reconoció que el centrocampista Marcos Senna "no está al 100%", pero que se trata de "un jugador muy importante" para el Villarreal por lo que estima que tener precaución con él porque se acaba de recuperar de una lesión. "Es un jugador que nos da mucha personalidad", apostilló.

Respecto al papel de favorito que le ha otorgado al Villarreal Huub Stevens, entrenador del rival, Valverde considera que es un intento de trasladar la presión al contrario por parte del técnico holandés pero que en su opinión, se trata de un partido abierto y no ve ningún tipo de favoritismo.