Michael Becker, abogado del capitán de la selección alemana, Michael Ballack, anunció que se plantea presentar una denuncia contra Boateng por la entrada peligrosa que le ha costado el Mundial: «En mi opinión, el ataque no es sólo una entrada dura sino una lesión intencionada. Podemos hacer una valoración jurídica y esto incluye, consecuencias civiles y penales».

Sin embargo, Ballack aseguró que no quiere «echar más leña al fuego» en el asunto, sino pasar página. «Estoy enfadado y decepcionado, evidentemente», añadió el jugador en Sicilia, donde pasará unos días con sus compañeros de la selección. Su ausencia ha suscitado una gran conmoción en Alemania y es, sobre todo, una mala noticia para los hombres de Joachim Low.

Boateng explicó que no lo hizo con mala intención. «Sólo puedo excusarme. Llegué tarde y lo golpeé de lleno, fue realmente algo estúpido. Me excusé dos veces en la cancha, y ésta es la tercera», declaró el futbolista del Portsmouth, que ha visto cómo su imagen ante la afición germana ha empeorado hasta límites insospechados.

Antes de marcharse al Tottenham en 2007, donde estuvo dos temporadas sin destacar, el centrocampista de 23 años apareció en la prensa por su juego al límite e incidentes fuera de los estadios.

Desde 2009, el jugador se decantó por defender la camiseta de Ghana en vez de Alemania, por lo que espera el visto bueno de la FIFA para que pueda representar al país de su padre. Preseleccionado en la lista de los 30, podría enfrentarse a la Alemania, donde juega su medio-hermano Jerome.

Y es que Alemania y Ghana se medirán el 23 de junio en el tercer partido de la primera fase, por lo que será un encuentro decisivo y morboso en el grupo D, en el que también están Australia y Serbia.