Las autoridades y los servicios de inteligencia sudafricanos intentan verificar las informaciones que indican que un ex coronel saudí ha sido arrestado en Iraq por planear un atentado contra el Mundial de fútbol, en colaboración con la organización terrorista Al Qaida. "Siempre hemos dicho que estamos preparados para resolver cualquier problema de seguridad durante el Mundial y que confiamos en nuestro plan (de seguridad), pero no estamos bajando la guardia", dijo hoy el portavoz del ministerio de inteligencia, Brian Dube, citado por el diario "The Star".

Dube aseguró que estaban al tanto de la información desvelada ayer por el portavoz de seguridad iraquí, el General Qassim Atta, y que los servicios de inteligencia estaban tratando de conocer los detalles de esta amenaza.

Tanto el Ministerio de Asuntos Exteriores como el de Cooperación sudafricanos intentan también confirmar la información procedente de Bagdad. "Es una fuente de gran preocupación que alguien haya sido arrestado por conspirar contra el Mundial de la FIFA. Esto es muy, muy serio y vamos a tener que esclarecer todos los hechos", dijo un especialista del Gobierno en asuntos saudíes.

Según fuentes oficiales iraquíes, hace dos semanas fue detenido Abdullah Azzam Saleh Misfar al-Qahtani, que había estado en contacto con el número dos de la organización Al Qaida, presuntamente para atentar contra el Mundial de fútbol.

La noticia se conoció ayer, el mismo día en que las fuerzas de seguridad sudafricanas escenificaron en el centro de Johannesburgo una demostración de fuerza, con helicópteros, sirenas y agentes ascendiendo paredes para demostrar que el país está preparado para organizar un Mundial seguro.

No es la primera vez que la sombra de Al Qaida planea sobre el Mundial de Sudáfrica: el pasado mes de julio la televisión estadounidense CBS informó de que la organización tenía como objetivo el campeonato y, especialmente, el partido de la primera fase entre Estados Unidos e Inglaterra.

El secretario general de la FIFA, Jerome Valcke, dijo entonces que "ninguna amenaza impedirá que el Mundial se celebre en Sudáfrica".

Los musulmanes sudafricanos se rebelan contra las amenazas de Al Qaeda al Mundial

El Consejo Judicial Musulmán (MJC, siglas en inglés), principal organismo representativo de los musulmanes sudafricanos, ha advertido hoy a Al Qaida que no le permitirán convertir el Mundial de fútbol en su particular campo de batalla política. "Los musulmanes de Sudáfrica somos sudafricanos, nacimos aquí, hemos peleado muy duro contra el 'Apartheid' para conseguir la democracia y nuestra responsabilidad es proteger a Sudáfrica", dijo el presidente del MJC, Moulana Ighsan Hendricks, al "Daily News". "No permitiremos a nadie, ya sea Al Qaida, un palestino, un iraquí, un paquistaní o incluso un bóer, destruir la existencia pacífica en la que hemos estado viviendo con nuestros conciudadanos sudafricanos", añadió. "Quedan unos días para el Mundial y no podemos permitir que ningún grupo terrorista, incluido Al Qaida, traiga su guerra a nuestro país", señaló.

El MJC respondía así a la información procedente de Iraq, según la cual un ex coronel saudí, llamado Abdullah Azzam Saleh Misfar al-Qahtani, fue arrestado hace dos semanas en Iraq por planear un atentado contra el Mundial de fútbol, en colaboración con la organización terrorista Al Qaida.

Hendricks se felicitó por esta detención y recordó a los grupos terroristas musulmanes que no cuentan con el apoyo de los musulmanes sudafricanos.

Por su parte, un especialista del Gobierno sudafricano en asuntos saudíes dijo hoy que "es una fuente de gran preocupación que alguien haya sido arrestado por conspirar contra el Mundial de la FIFA". "Esto es muy, muy serio y vamos a tener que esclarecer todos los hechos", señaló.

Las ministerios de Asuntos Exteriores y Cooperación sudafricanos, así como los servicios de inteligencia del país, intentan verificar las informaciones procedentes de Iraq. "Siempre hemos dicho que estamos preparados para resolver cualquier problema de seguridad durante el Mundial y que confiamos en nuestro plan (de seguridad), pero no estamos bajando la guardia", dijo hoy el portavoz del ministerio de inteligencia, Brian Dube, quien explicó que están tratando de conocer todos los detalles.

Sudáfrica insiste desde hace meses en transmitir un mensaje de tranquilidad, fundamentalmente desde el atentado que sufrió la selección de Togo antes del inicio de la Copa de África, y no ha escatimado demostraciones de fuerza para enseñar al mundo que el de 2010 será un Mundial seguro.

Decenas de policías han sido meticulosamente entrenados, las Fuerzas Armadas han puesto su personal y sus recursos al servicio del Mundial, e Interpol, a través de su secretario general, Ronald Noble, se deshizo en halagos ante el plan de seguridad sudafricano.

No es la primera vez que la sombra de Al Qaida planea sobre el Mundial de Sudáfrica: el pasado mes de abril la televisión estadounidense CBS informó de que la organización tenía como objetivo el campeonato y, especialmente, el partido de la primera fase entre Estados Unidos e Inglaterra.

El secretario general de la FIFA, Jerome Valcke, dijo entonces que "ninguna amenaza impedirá que el Mundial se celebre en Sudáfrica".