El Levante empieza a partir de ahora su Liga particular ante rivales directos tras haberse enfrentado en las primeras cinco jornadas a cuatro equipos que juegan en competiciones europeas en la presente campaña, y haber sumado cuatro puntos, uno de ellos frente al Real Madrid.

El conjunto que entrena Luis García Plaza, técnico debutante en Primera División, ha superado un inicio de campaña complicado ante rivales de la talla del Sevilla, Getafe, Villarreal o Real Madrid, e incluso ha logrado puntuar en dos encuentros y anotar cuatro goles.

Pese a ser la 'Cenicienta' de Primera División, el equipo de menor presupuesto del campeonato y el más goleado de la tabla, el Levante no ha sufrido traumas, como demostró ante el Almería, el primer rival de su 'talla' con el que se encontró y ha experimentado una notable evolución en apenas cinco jornadas.

Sin embargo, será en los próximos ocho encuentros de Liga donde el Levante deberá evidenciar realmente su mejora y su posibilidad de ampliar su cuenta de puntos, dado que se medirá a rivales con los que previsiblemente peleará por eludir el descenso en el tramo final de la Liga.

En sus compromisos más inmediatos, el conjunto de Luis García Plaza viajará a Pamplona para medirse al Osasuna, recibirá en casa a la Real Sociedad y se enfrentará a Espanyol y Mallorca de forma consecutiva como visitante.

Tras estos partidos, recibirá al Deportivo de La Coruña, jugará contra el Málaga en La Rosaleda, frente al Racing en el Ciudad de Valencia y viajará a Alicante para enfrentarse al Hércules.

Serán ocho partidos de Liga ante rivales de menor entidad de los que ahora se ha encontrado y que comparten objetivos con el club valenciano y ante los que estará obligado a puntuar, entre ellos los recién ascendidos Real Sociedad y Hércules.

El calendario ofrecerá un "respiro" al equipo del barrio de Orriols hasta diciembre, cuando le corresponde recibir al Atlético de Madrid, y medirse en las siguientes jornadas al Sporting, Athletic Club de Bilbao, Barcelona y Valencia.

Esta sensación también es compartida por el cuerpo técnico y la mayor parte de la plantilla del Levante, como asegura el delantero Rubén Pérez, quien augura "encuentros complicados".

"Está claro que en Primera División todos los encuentros van a ser complicados, pero ahora empieza la Liga del Levante, nos toca jugar contra equipos de menor nivel ante los que hemos de centrar todos nuestros esfuerzos", ha manifestado.

A su juicio, el Levante está capacitado para "hacer daño" a cualquier equipo, como demostró ayer frente al Real Madrid, de modo que apuesta por "hacerse fuertes en casa" como la base para seguir sumando puntos.

Rubén ha reconocido que este empate "da muchas fuerzas al equipo" para iniciar un tramo de competición que resultará decisivo para las aspiraciones del equipo. "Empezamos en el campo de Osasuna y hay que intentar arañar algo como sea. Esta será la Liga en la que jugaremos el resto del año", ha apuntado.

"Ojalá que todos los equipos que nos visiten en casa se dejen puntos como hizo el Real Madrid. No sé si les pasará factura o no, porque la verdad es que esa no es nuestra guerra, pero espero que sirva para que el resto de equipos vean de lo que somos capaces", ha añadido el delantero asturiano.

Para Rubén, el apoyo del público será esencial en el resto de compromisos como local. "Si queremos estar en Primera el próximo año cada partido ha de ser una fiesta como lo fue ayer frente al Real Madrid. Peleamos todos, nosotros en el campo y el público desde las gradas, y cuando uno salta al campo con este ambiente las piernas van solas", ha concluido.