El portavoz y secretario de la Junta Directiva del Barcelona, Toni Freixa, ha considerado que "por el bien del fútbol español" la final de Copa del Rey entre el equipo azulgrana y el Athletic de Bilbao debería ser en el Santiago Bernabéu, donde no "le consta" que vayan a realizarse obras en esas fechas. "A mí no me constan las obras. Oficialmente no han dicho nada. Hemos cursado una petición y esperamos que con el mismo respeto que la cursamos, con el mismo respeto que fuimos a la reunión de Madrid, se nos responda. Aunque sea una negativa absoluta. Los socios de Barça y Athletic merecen más respeto que una información filtrada", ha dicho Freixa.

El portavoz ha hecho referencia así a las informaciones sobre la realización de unas obras de mejora en el feudo del Real Madrid, que imposibilitarían poder acoger la final de Copa en este estadio, como solicitaron ambos clubes finalistas el lunes en una reunión con la Federación, en base a criterios de aforo y neutralidad.

Así, Freixa ha señalado: "si buscamos el bien del fútbol español, no puede ser en otro estadio que en ese. Si después hay otros factores que no conocemos, quizás todo esto no tiene sentido".

Y es que, a su juicio, "podría ser un gran ejemplo para la sociedad un partido entre vascos y catalanes en la capital española y que fuera un verdadero ejemplo de civismo". Y ha añadido: "Todos los protagonistas de todo este circo que es el fútbol deberíamos asumir nuestra responsabilidad para ser un espejo y un ejemplo".

En este sentido, Freixa ha reiterado que ambos clubes manifestaron el lunes su "absoluta preferencia para que el estadio fuera el Santiago Bernabéu". "No tenemos más noticia", recalcó.

Por ello, en la reunión de ayer de la Junta Directiva azulgrana se acordó "el pleno sometimiento a lo que la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) decida".

"Pero este pleno sometimiento no está reñido con que agotemos nuestras posibilidades", ha advertido, recordando que el Bernabéu permite acoger una diferencia de diez mil socios más para cada finalista, respecto a otros estadios. "Merecen que el club se ponga en esta posición, no de inflexibilidad, pero sí de rotundidad".

"Por el bien del fútbol español se deberían hacer las gestiones necesarias para conseguirlo", ha reiterado Freixa. "Y como nos lo tomamos seriamente y lo que hacemos es representar una masa social considerable, la importancia de la decisión no contemplaba hablar de planes B".

Aún así, ha matizado que en el caso que el estadio madridista no fuera posible, el Barcelona contemplaría "otras opciones", aunque "en ningún caso" el Camp Nou o San Mamés, ya que uno de los criterios principales era la neutralidad, así como "tampoco campos fuera del territorio de la RFEF, aunque sean idóneos", en referencia al rumor acerca del estadio francés de Saint-Denis.

Tampoco se ha mostrado demasiado favorable a la designación de una sede desde inicio de temporada. "El problema es que si designamos a priori, podría pasar que no se cumpliera el criterio objetivo de la neutralidad o que el aforo no fuera el máximo posible. Lo que ha hecho la Federación está bien".

Haciendo hincapié en que el propietario del estadio, en este caso el Madrid, es quien en todo caso decide la cesión del recinto, ha negado que el Barça se negara a ceder el Camp Nou para la final de 2004 entre los blancos y el Real Zaragoza, que pidió el Ayuntamiento barcelonés y que se jugó en el Estadi Olímpic Lluís Companys.

"Lo de 2004 no me consta en absoluto, la determinación de la sede se debió hacer con las preferencias normales. En absoluto me consta que el Barça hiciera absolutamente nada", ha recordado.

Además, ha aseverado que, si se tratara de otros finalistas, "para el Barça sería un honor, es el partido más importante del fútbol español y genera unos rendimientos económicos importantes. El Barça asume en su responsabilidad en el fútbol español".