Quique Hernández, entrenador del Hércules, afirmó este viernes que no siente "ninguna espada de Damocles" encima que le amenace con perder el puesto en el caso de que no gane este sábado a Las Palmas.

El Hércules acumula nueve jornadas consecutivas sin ganar y el puesto de Quique Hernández ha sido puesto en duda por los dirigentes de la entidad desde hace semanas, aunque finalmente el técnico ha conseguido mantenerse en su cargo.

Hernández aseguró que no se encuentra preocupado por su situación y añadió que "hay muchos problemas más graves en el país y colectivos" como para lamentarse de lo que sería "un problema individual y menos grave". "Hay que ganar a Las Palmas y lo demás no me preocupa", dijo.

El valenciano insistió una semana más en que el Hércules está "en el buen camino" y confía en que ante Las Palmas consigan una victoria que vienen buscando "con poca fortuna y mucha actitud".

Hércules y Las Palmas ya se enfrentaron esta temporada en Copa del Rey, en una eliminatoria en el que el conjunto canario se impuso por autoridad por tres goles a cero.

Hernández auguró un encuentro diferente al que disputaron en el estadio Gran Canaria en Copa, entre otros motivos porque el hecho de jugar en casa les debería "beneficiar" y también "por las ganas que tiene el equipo de salir" de la dinámica negativa en la que se encuentra.

Advirtió, no obstante, que no será un partido fácil para el Hércules porque Las Palmas es un equipo que "juega muy bien al fútbol", que mantiene la estructura y el entrenador (Sergio Lobera) de la pasada temporada y cuenta con un trabajo de cantera "muy bueno".

Además, hizo hincapié en el buen momento que atraviesa Las Palmas, que acumula cinco jornadas sin perder, y se centró, sobre todo, en su victoria a domicilio frente al Sporting de Gijón, en un partido "muy abierto". "Espero un partido difícil, pero creo que se puede ganar", sentenció.

Hernández se refirió a la baja del centrocampista Apoño en Las Palmas para apuntar que no se alegra de las lesiones ni ausencias de ningún contrario y centrar el discurso en su equipo porque "la necesidad de ganar es prioritaria". "Es un partido importante para ganar en autoestima y confianza", defendió el técnico.

Por otro lado, después de que en las últimas alineaciones ha contado más con jugadores que ya estaban en la plantilla de la pasada temporada y ha prescindido de muchos de los futbolistas que llegaron de la mano de Quique Pina, Hernández aseguró que no es algo en lo que se fije. "Todos son jugadores del Hércules, buenos profesionales y con la mejor predisposición", argumentó.