Fran Escribá, entrenador del Elche, aseguró en rueda de prensa que el Celta, próximo rival del equipo ilicitano, está "un paso por delante" de muchos de los equipos que pelean por la permanencia. "El Celta está un paso por delante de un grupo de seis o siete equipos que luchan por la permanencia. El año pasado les ganamos los dos partidos, pero tienen una gran plantilla", aseguró Escribá.

El entrenador valenciano comentó que el conjunto gallego "se encuentra cómodo con el balón, como hacía con Luis Enrique el año pasado, y toma menos riesgos defensivos".

"Tenemos que quitarles el balón. No veo un partido que se dispute en nuestro campo. Tenemos que incomodarles para que no tenga el balón y, a partir de ahí, jugar nuestras bazas", añadió.

El técnico del equipo ilicitano afirmó también que en el vestuario dolió mas la derrota ante el Eibar en el Martínez Valero, "porque es un rival directo", que la del martes contra el Real Madrid, "aunque afea el trabajo que hicimos".

Lo que no contempla Escribá es que ante el Celta se produzca una tercera derrota consecutiva, por lo que "sólo hay que pensar en ganar".

"Hay que pasar página. Estoy convencido de que no llegará una tercera derrota consecutiva. Los chicos están convencidos de la importancia del partido", explicó.

Para recibir al Celta, Escribá solo tiene la baja de Aarón Ñiguez, con una microrrotura de fibras, y mantendrá a Manu Herrera en la portería en detrimento de Tyton, aunque afirmó que el polaco tiene toda su confianza y que el cambio es debido a que "no estaba en su mejor momento y no transmitía seguridad al grupo".

El entrenador del Elche, que ha pedido a la grada que "no pite a los jugadores" porque considera que "es contraproducente", aseguró que "ganar al Celta es muy importante para seguir sumando y para que el equipo esté tranquilo".

Escribà anunció que hará cambios con respecto al partido del martes ante el Real Madrid, por lo que todo apunta a que Damián Suárez y Enzo Roco volverán a jugar de inicio.