Fran Escribá tiene un pie y medio en el Getafe. Su fichaje se da prácticamente por seguro desde el Coliseum, donde se habla de un pacto verbal a expensas de que los getafenses confirmen su continuidad en Primera División, pendiente de un posible descenso administrativo por impagos a Hacienda. Para Escribá sería su regreso a un club en el que ya trabajó como segundo de Quique Sánchez Flores.

Pese a todo, Escribá tiene dos años de contrato más en el Elche, que también está pendiente del recurso que el próximo martes interpondrá ante el TAD para quedarse en Primera. La diferencia entre estar en una categoría u otra es que la cláusula de rescisión del técnico puede pasar de un millón a sólo 100.000 euros, aunque también es cierto que el club le adeuda buena parte de la ficha de la temporada pasada, lo cual podría ser significativa en una hipotética negociación para su salida.

El valenciano, uno de los técnicos revelación del momento, no se ha pronunciado públicamente sobre su futuro, aunque sí que ha deslizado su voluntad de poner punto y final a su etapa en el Martínez Valero por el desgaste acumulado. Así se lo ha hecho saber a Juan Anguix en las reuniones que en las últimas semanas han mantenido en privado. Antes del Getafe, su nombre estuvo en las quinielas de clubes como el Olympiacos griego.