Después de que trascendiera el embargo de un Porsche Panamera que presuntamente compró de manera ilegal en 2011, Neymar ha colgado este jueves en las redes sociales una foto suya sentado en el techo de su última adquisición: un Ferrari rojo que ya tiene aparcado en el garaje de su flamante casa.

"Gracias a Dios por darme salud y con el esfuerzo de mi trabajo poder realizar otro sueño de mi infancia", ha escrito el brasileño, que no parece preocupado por sus problemas con la justicia. El Porsche embargado fue adquirido por 87.250 dólares a través de una de las empresas que se encargan de sus derechos de imagen. El pasado julio fue confiscado por presuntas irregularidades.