El Barcelona había decidido impedir que los medios de comunicación ajenos al club puedan entrevistar a los futbolistas azulgranas y a todos los componentes de sus secciones profesionales con la idea de potenciar los contenidos exclusivos de la entidad, pero pocas horas después del anuncio y tras el aluvión de críticas, se retractaron.

La resolución, confirmada a EFE por un portavoz de la entidad, se basaba en que únicamente los medios oficiales del FC Barcelona (Barça TV, la revista de la entidad, la página web y los perfiles propios en redes sociales) dispongan de estas entrevistas para potenciar sus contenidos propios.

El club decidió entonces que esta decisión no solo afectara a los jugadores del primer equipo de fútbol, sino también al resto de componentes de las secciones profesionales: baloncesto, balonmano, fútbol sala y hockey patines.

Por todo ello, las únicas opciones de conocer de primera mano la opinión de los protagonistas hubieran sido las ruedas de prensa oficiales que se organizarán en la víspera y tras los partidos. Al final, todo ha quedado en una farol del club catalán.