De la despedida de Luis Enrique a la incógnita sobre el futuro de Pellegrino pasando por los granotas Deyverson y Camarasa, que a partir del 30 de junio volverán a ser jugadores del Levante. La final de Copa, el último partido que acogerá el Calderón, está llena de protagonistas. Sin embargo, por encima de todos ellos destaca uno: Paco Alcácer. El exdelantero del Valencia, sin Luis Suárez en liza, tiene ante sí esa oportunidad que lleva meses esperando. Tras llegar como cuarto delantero y haber pasado momentos realmente angustiosos, negado de cara a portería y relegado a veces incluso en beneficio de Arda Turan, contra el Alavés será titular en busca de redimirse de un año muy complicado para él.

El Barça, con Alcácer en el once de inicio y todavía con el mal sabor del desenlace liguero, se dispone a cerrar un ciclo que supondría el noveno título en tres temporadas de Luis Enrique. Delante estará para impedirlo el Deportivo Alavés, revelación en LaLiga de la mano de Pellegrino y presente por primera vez en la final copera con un equipo que por méritos propios se codeará en la historia con aquel que rozó la Copa de la UEFA. Un rival, por cierto, que ya le armó el taco en su propia casa a los de Luis Enrique gracias a un gran Deyverson. El brasileño, delantero de referencia, se perfila titular a diferencia de su colega Camarasa. Y es que el de Meliana podría ser el damnificado si se juega con tres centrales.

Para el Barça, rey de Copas con 28 títulos, será su trigésimo novena final, la cuarta seguida. De lograr la victoria encadenaría tres temporadas levantando este trofeo del KO.

Más allá de Luis Suárez, el handicap para Luis Enrique es la baja de Sergi Roberto, pese a que la lista de ausencias se extiende a los lesionados Mathieu, Rafinha y Aleix Vidal, aunque en éste último ha empezado a entrenarse esta semana con sus compañeros tras superar una grave lesión de tobillo, y el propio Luis Enrique no ha descartado que pueda tener el alta hoy mismo.

Sin Sergi Roberto, el puesto en la derecha de la zaga podría ser para Mascherano, ya recuperado de las molestias musculares que le impidieron disputar las dos últimas jornadas ligueras. También regresará Gerard Piqué, que volverá a formar pareja en la zaga con Samuel Umtiti tras superar un virus intestinal que le ha tenido dos semanas de baja.

La Copa es para el Barça el último bálsamo que le queda con el que curar las heridas de este curso, donde no ha sabido competir lejos del Camp Nou cuando llegaron los cruces en la Liga de Campeones y ha desaprovechado, indolente, la ocasión de reeditar el título de Liga.

Un estado de ánimo diferente al del Alavés, que no se ha dejado llevar por la euforia y, a pesar de conseguir el objetivo de la salvación, ha sido fiel a su estilo y no ha levantado el pie del acelerador en la recta final de LaLiga, lo que les ha permitido llegar con tensión y buenas sensaciones a esta final. La única ausencia para Pellegrino es la de Víctor Laguardia, lesionado de larga duración, mientras que el ítalobrasileño Ely se encuentra ya en plenas facultades tras superar los problemas musculares que lo tuvieron en duda.