Vincenzo Montella ya es una realidad en el Sevilla tras la salida hace una semana de Eduardo 'Toto' Berizzo. Después de sondear a Javi Gracia, Joaquín Caparrós, Tuchel o Juande Ramos, la cúpula del club hispalense apostó por el italiano para hacerse cargo de un banquillo, que todavía echa de menos a Unai Emery. A aquella relación de amor-odio que conectaba al técnico de Hondarribia con unos aficionados que en muchas ocasiones le silbaron, pero que desde su salida no han encontrado estabilidad y paciencia. Paradójicamente, el Sánchez Pizjuán recibe ahora, con más dudas que certezas, a aquel que se ha ganado el sobrenombre del 'Emery italiano'. El propio Joaquín, capitán del Betis, lo definió así en su unión en la Fiorentina.

«El principio de acuerdo llega una vez que los abogados de Montella han alcanzado una entente con el AC Milan para la desvinculación del técnico, que rubricará este mismo viernes el entrenador en las oficinas del club rossonero». Así lo hacía oficial el club de Nervión, al que llegará en la jornada de hoy el técnico italiano, el primero en la historia de la entidad y el noveno en entrenar en España.

La llegada de Montella pone punto y final a una semana en la que el banquillo del Sevilla ha estado desierto. Con Berizzo fuera comenzó la búsqueda por parte de una directiva que apuntó a muchos sitios, pero que desde este martes tenía claro quién quería que fuera su entrenador. Eso sí, lejos de la euforia de una afición que pedía un perfil totalmente opuesto. La grada quería un técnico de casa, o al menos español. En esa lista estaban Mazzarri, Juande Ramos, Joaquín Caparros y Javi Gracia.

Con Montella, el Sevilla ficha orden táctico pero firma a un entrenador por hacer. Un técnico que en la Roma inició su carrera en los banquillos pero que fracasó en la Sampdoria y en el Milan. La inversión realizada en verano con el conjunto de San Siro no fue suficiente para ver a un equipo sólido y con un buen nivel competitivo. Bonucci, Kessié, Biglia o André Silva fueron insuficientes para estar en la zona alta y la directriva rossonera acabó con él.

La Fiorentina puede considerarse su mejor proyecto. En el Artemio Franchi logró dejar al equipo viola cuarta clasificado los tres años en los que estuvo en Florencia y sobre todo, el fútbol de esa plantilla enamoró en muchos momentos al fútbol italiano. Cuadrado, Borja Valero, Neto en portería, Savic y Aquilani fueron algunos de los protagonistas en aquella 13/14 en la que llegó Joaquín a la entidad. Precisamente fue él quien le comparó con Emery. «Son dos maníacos de la parte táctica. Montella, sin embargo, tiene una gran dote. Lo principal es la táctica, sí, pero el jugador es libre de probar el uno contra uno con libertad cuando tiene la inspiración correcta», señaló. Emery, al igual que Montella desde que se hiciera oficial de la noticia, no ha sido sin embargo bien recibido en una ciudad en la que la exigencia es máxima y que cerca estuvo de acabar con Unai en sus primeros meses.