«Siempre nos quedará París...». Esa frase —que para ser exactos en realidad es «Siempre tendremos París...»— ha pasado a la historia tras ser pronunciada por Humphrey Bogart en el tramo final de la película ´Casablanca´... y viene que ni pintada para la ocasión porque este miércoles el PSG de Emery encajó una dolorosa derrota precisamente en la Casa Blanca, el Santiago Bernabéu, y lo único que le queda al técnico de Hondarribia es voltear la eliminatoria en París si no quiere convertirse en el gran perdedor de la temporada.

El semblante de Unai, mascullando entre dientes de pie en el área técnica justo después de que su equipo encajase el 3-1 en el minuto 85, nos resulta familiar. Aquí en València se lo vimos en más ocasiones de las deseadas.

El miércoles, en un partido en el que su equipo se adelantó en el marcador, quizás sea injusto decir que no acertó en sus decisiones, pero es incuestionable que Zidane hizo un doble movimiento final en la partida de ajedrez que fue el encuentro que el de Hondarribia no supo contrarrestar y que puede ser clave en la eliminatoria.

El Madrid empezó enseñándole los dientes con faltas continuas a Neymar en cada acción en la que el brasileño entró en contacto con el balón y pudo incluso adelantarse en una acción que Areola despejó con la cara en el mano a mano frente a Cristiano, pero fue el PSG quien golpeó primero. Un centro desde banda derecha que Cavani dejó pasar en el primer palo con inteligencia e instinto fue finalizado por Rabiot llegando desde atrás (0-1).

Ese tanto francés es el que en estos momentos le concede alguna posibilidad en la eliminatoria a un PSG que cometió su primer error grosero cuando Lo Celso, justo antes del descanso, hizo un penalti evitable agarrando a Kroos por el hombro. Cristiano lo transformó en el 1-1 pese a que Areola estuvo muy cerca de llegar al balón.

Se iniciaba así un segundo acto en el que los galos, pese al empate encajado y quizás conscientes de que el gol anotado era a esas alturas aún un valioso botín, salieron agitados.

Balón al brazo de Ramos

En ese reinicio Keylor tuvo que emplearse a fondo ante Mbappé y un nuevo remate de Rabiot con marchamo de gol, llegando desde atrás, se estrellaba dentro del área madridista en el brazo pegado al cuerpo de Sergio Ramos. El colegiado no lo sancionó como penalti —pese a que Emery lo reclamó con vehemencia— y poco después de nuevo Ramos taponó un remate de Kimpembe casi a bocajarro justo antes de que otro balón se pasease por área madridista sin que Mbappé ni Alves llegasen al remate por escasos centímetros.

Unai a esas alturas había decidido prescindir de Cavani para dar entrada a Meunier y jugar con doble lateral en banda derecha, con Dani Alves por delante llegando con peligro y dando la sensación de que el conjunto parisino podía incluso asestar un zarpazo que habría resultado casi definitivo en el devenir de la eliminatoria.

Se entraba así en la recta final del duelo con la sensación de que el conjunto francés tenía más cerca en 1-2 que el 2-1, pero entonces llegó la decisión clave.

Acierto de Zidane

El técnico galo arriesgó, quitó a Casemiro para dar entrada a Asensio a falta de diez minutos y al mallorquín aún le dio tiempo de destrozar al conjunto francés por su parcela primero con un centro que Cristiano finalizó casi de rebote (2-1) y después con una nueva asistencia a Marcelo que el brasileño remató a gol con la tibia (3-1), pero de forma muy efectiva.

Se había llegado a los últimos diez minutos de partido con el PSG mejor que el Madrid, pero en un abrir y cerrar de ojos el gen ganador que se activa en el conjunto merengue cuando llega la Liga de Campeones había conseguido voltear el partido y otorgarle una ventaja importante en la eliminatoria... aunque siempre nos quedará París.

Real Madrid: Navas, Nacho, Varane, Ramos, Marcelo, Casemiro (Lucas Vázquez, 79´), Modric, Kroos, Isco (Asensio, 79´), Cristiano y Benzema (Bale, 68´).

PSG: Areola, Alves, Marquinhos, Kimpembe, Berchiche, Lo Celso (Draxler, 84´), Verratti, Rabiot, Mbappé, Neymar y Cavani (Meunier, 66´).

0-1 Rabiot, m. 33; 1-1 Cristiano Ronaldo (p.), m. 45; 2-1 Cristiano Ronaldo, m. 83; 3-1 Marcelo, m. 87.

Gianluca Rocchi. Amonestó a los locales Isco y Nacho, así como a los visitantes Neymar, Lo Celso, Rabiot y Meunier.

Santiago Bernabéu ante 78.158 espectadores.