El médico que supervisa la intervención de Neymar, el doctor Lasmar de la selección de Brasil, ha confirmado a medios de su país que el brasileño será operado en Brasil esta misma semana y que estará de baja tres meses, lo que significa que se podría perder una hipotética final de Champions si es que el equipo francés logra eliminar al Madrid y llegar hasta la gran cita.

La decisión de operarse ha sido tomada por el jugador, su padre y el mencionado médico tras una reunión con el cuerpo médico del PSG, pero todo apunta a que Neymar de antemano ya había decidido que no iba a jugar infiltrado —que era otra de las alternativas que podría haber tomado para seguir ayudando a su equipo en el tramo final de temporada— ante la posibilidad de que su presencia en el Mundial de Rusia corriese algún riesgo. Esa decisión habría molestado a la cúpula del conjunto francés al entender que ha antepuesto sus intereses personales a los de el club que este verano invirtió 222 millones en su fichaje hasta el punto de plantearse una futura venta.