El guardameta del Manchester United y de la selección española, David de Gea, no pudo tener la fiesta en paz. Y la de Alicante, especialmente. Vinculado emocional y familiarmente a esta provincia -su padre es de Redován y veranea en la urbanización Gran Alacant cerca de Los Arenales-, siempre que puede intenta disfrutar de los encantos de la noche alicantina.

Y en la madrugada del martes al miércoles lo volvió a hacer. A la misma hora a la que el avión de la selección española despegaba de El Altet rumbo a Barajas, la 1:25, el guardameta internacional llegaba a la calle del Teniente Álvarez Soto para disfrutar de la fiesta privada que le habían preparado en el club Concerto.

[De Gea fotografía a Edurne desnuda entre las sábanas]

Previamente, desde las 00:40, una docena de chicas jóvenes comenzaron a llegar en grupos de dos y tres a este establecimiento, que sólo abre de jueves a domingo, pero que en la noche del martes hizo una excepción ante la ilustre visita del futbolista de 27 años.

De Gea llegó hasta la calle de Bailén a bordo de una furgoneta oscura acompañado por un grupo de amigos, entre los que no figuraba ningún otro internacional español, y enfiló a pie el corto trayecto de apenas 20 metros hasta el Concerto.

Pero la fiesta se le torció. Escoltado por dos operarios del local de copas, el portero se sobresaltó cuando advirtió la presencia de una redactora gráfica y dos redactores del diario Levante-emv.

Rápidamente, De Gea volvió sobre sus pasos mientras uno de los citados operarios, con malos modos y empleando la fuerza, impidió a la redactora captar imágenes del guardameta.

Con todo, el contratiempo festivo para De Gea no fue especialmente grave. A las 2:08, las jóvenes abandonaron el club Concerto situado junto a la zona de marcha de la calle Castaños y varias de ellas se desplazaron hasta otro local nocturno del mismo grupo empresarial situado en las inmediaciones de la plaza de Gabriel Miró.

A ese segundo local ya se había desplazado la furgoneta en la que se marchó precipitadamente De Gea y en su puerta permaneció estacionada hasta bien entrada la madrugada.

No es la primera vez que este club nocturno acoge una celebración de la selección española. Ya fue la sede de la fiesta privada que disfrutaron varios internacionales en la noche del pasado 6 de octubre cuando España selló su billete para el Mundial de Rusia tras golear 3-0 a Albania.