Un partido de protagonistas. Muchos de ellos negativos. Ni Barcelona, ni Real Madrid están en un buen momento. Desde la Ciudad Condal de hecho han tenido la fortuna del caos que está sufriendo LaLiga este curso. Desde lo más alto de la tabla, donde empezaron esta jornada, la mayoría de los defectos culés quedan en un segundo plano. Sin embargo, en el Santiago Bernabéu el problema es mayor. Lopetegui está en el ojo del huracán desde que perdió la Supercopa de Europa contra el Atlético de Madrid. Después llegó el 0-3 en el Pizjuán y el empate ante el cuadro colchonero en Chamartín.

En el bando azulgrana la situación de la Champions League y la figura de Leo Messi ha apagado incendios que ahora, sin el argentino, pueden salir a flote. De hecho, una derrota en el Clásico podría provocar un caos en la Ciudad Condal después de todos los problemas que está teniendo Ernesto Valverde para hacer funcionar al equipo azulgrana. Los problemas se han acumulado este año y al margen del '10' solo Ter Stegen y Coutinho han mantenido la exigencia culé.Los señalados culés

El resto, ni en defensa ni en ataque ha cambiado la preocupación por tranquilidad. Luis Suárez es el primero de ellos. En el último encuentro de Champions estuvo a gran nivel, pero de asociación no en la finalización. Ahí el uruguayo volvió a fallar. Como lo lleva haciendo desde final del curso pasado. Sin embargo su competencia es Munir, lejos de tener oportunidades con Valverde. Por su parte, Dembélé comenzó bien pero ahora desespera al banquillo y el último día recibió pitos por parte de la grada del Camp Nou.

Lo mismo sucede con Arturo Vidal. El chileno suma demasiados episodios polémicos lejos del terreno de juego esta temporada. Mensajes en las redes sociales, caras de enfado y otras situaciones que en Can Barça no pueden suceder. Después está la defensa. Umtiti empezó mal después de su gran Mundial y Piqué no dio estabilidad. Es más, solo Lenglet parece aportar algo de sensatez en esa parcela azulgrana.

Los señalados merengues

En el bando blanco la situación es todavía peor. Lopetegui sabe que una derrota e incluso un empate en el Camp Nou dejaría su puesto en el aire. De hecho, incluso una victoria podría acabar con despido. La situación en el césped tiene los mismos tintes dramáticos. Modric, uno de los más destacados en el Mundial de Rusia y en plena carrera a por el Balón de Oro, está en un momento malo de juego y no está ejerciendo de líder. Es más, en verano forzó su marcha rumbo al Inter de Milán.

En la delantera nada cambia. Benzema y Bale comenzaron la temporada en un estado de forma envidiable. Cristiano Ronaldo parecía incluso quedar muy atrás. Algunos se atrevían a decir que la marcha del delantero portugués no iba a hacer mella, pero todo ha cambiado ahora. El francés sigue sin tener pegada, ni gol. Y el jugador galés estiró la cuerda en exceso cuando forzó para irse con la selección en lugar de recuperarse en Chamartín de sus problemas físicos. Esos que le han tenido algún tiempo fuera del césped.

Críticas a Ramos y Florentino

Para colmo, dos figuras intocables en la Castellana también están siendo duramente criticados por el madridismo. El primero de ellos es Sergio Ramos, quien se atrevió a golpear en dos ocasiones, al menos intentarlo, a un canterano como Reguilón, aunque después trató de solucionarlo. Por último está Florentino Pérez. Pensando más en la remodelación de su estadio antes que en los fichajes, al presidente se le olvidó fichar un goleador tras la marcha de Cristiano.