El fútbol es un estado de ánimo. Que se lo digan al Toko Ekambi, que por fin sonríe desde que llegara al Villarreal el pasado mercado de verano. Ante el Rapid Viena fue capaz de cambiar los pitos de La Cerámica, ansiosa porque veía que el gol no llegaba, por aplausos. Qué importante fue la victoria ante los austriacos y qué liberación para muchos, entre ellos el delantero francocamerunés.

La Cerámica fue testigo de los primeros grandes minutos de Ekambi: un futbolista que aún no ha demostrado de qué pasta esta hecho pero que ya ha dejado los primeros destellos del potente jugador que aspira a ser. En este sentido, el gol y las dos asistencias que sumó ante el Rapid Viena harán que suba su moral y también su confianza; aspectos imprescindibles para que reluzcan las cualidades que hicieron que el Submarino apostara fuertemente por él el pasado verano. «Hacía falta ganar así. Marcar tantos goles es bueno para todos», sostuvo tras el 5-0.

Apuesta por cinco temporadas

Su notable campaña con el Angers en la Ligue 1, equipo con el que anotó un total de 17 dianas y repartió 6 asistencias, unidas a sus potentes cualidades tanto físicas como técnicas, fueron determinantes para la apuesta grogueta por el atacante de 26 años, que firmó por cinco temporadas con el equipo que dirige Javi Calleja.

Costó que arrancara, pero Ekambi ha dado un paso adelante en el último mes. Justo cuando más lo necesitaba su equipo. Llegar a Vila-real con la etiqueta de sustituto de Bakambú no debió de ser fácil, pero su adaptación está llegando poco a poco. «Estos partidos generan confianza», argumentó.

A gusto con el 4-2-3-1

En Francia demostró que se desenvuelve mejor con otra referencia a su lado, aunque ante el Rapid Viena fue la única pieza arriba hasta la entrada de Gerard Moreno; fruto del cambio de sistema al 4-2-3-1 que ha alternado por completo la imagen del Submarino con dos buenos partidos ante Atlético y Rapid Viena en menos de una semana.

Pero Ekambi tiene otras muchas cualidades por explotar en el conjunto amarillo. El francocameronés se desenvuelve bien con espacios y es letal si define al primer toque. Además, mentalmente ha demostrado ser fuerte; quizás por eso no bajó los brazos cuando falló las tres primeras ocasiones claras y terminó señalándose la cabeza al marcar el segundo en el último encuentro de Europa League.

La parroquia amarilla ha sido exigente con el que casualmente es el mejor de los delanteros del equipo. De hecho, ningún otro delantero de LaLiga tiene mejores registros recientes que el Toko Ekambi, que desde que se estrenara de amarillo ante el Athletic ha sumado cuatro goles -que podrían ser cinco, pero la UEFA dio como autogol el segundo que anotó ante el Rapid- y dos asistencias. Desde aquella jornada seis liguera hace ahora un mes ha sido el mejor y promedia el mejor registro de goles por minuto. Ekambi necesita 75 minutos para ver puerta. Tiempo al tiempo; Ekambi ya ha despegado.