El PSG introdujo criterios de origen étnico al fichar a jóvenes para su centro de formación, algo que está prohibido en la legislación francesa, según desveló ayer el consorcio de medios Football Leaks.

Los encargados de captar futuras promesas por todo el país debían rellenar fichas en las que había un apartado sobre el origen, con cuatro apartados: francés, magrebí, antillano y africano. Ante esta conducta, la ley francesa penaliza con hasta cinco años de cárcel y 300.000 euros de multa la «recogida o el tratamiento de datos de carácter personal que incluyen, directa o indirectamente, orígenes raciales o étnicos de personas».

Football Leaks también publicó actas de reuniones entre miembros del equipo de fichajes de jóvenes del club, en el que quedaba patente que se quería reclutar a menos jugadores de origen africano o antillano. En el ojo de la acusación está Marc Westerloppe, responsable de la llegada de jóvenes al PSG desde 2013, que en una reunión dejó claro que había «demasiados antillanos y africanos» en el club y que la dirección quería más franceses.

El club, propiedad de un fondo soberano catarí, negó estar al corriente de estas prácticas para realizar fichajes, pese a que en algunas de esas actas se asegura que había órdenes expresas en ese sentido.

La polémica salpica al club francés, líder de la Ligue 1 unos días después de que se conociera que el PSG y también el Manchester City se saltaron el Fair Play financiero Fair Play financierocon la aprobación de la UEFA. Tal y como destapó, en este caso, el rotativo alemán Der Spiegel, Infantino -presidente de la UEFA- pasó por alto estas irregularidades.

El conjunto francés, que debió ser expulsado de la Champions, recibió de forma fraudulenta un ingreso de 1.800 millones de euros por parte del gobierno de Qatar.