La Comisión Nacional Contra la Violencia ha propuesto una sanción de 60.001 euros y cinco años de prohibición de acceso para dos aficionados por su violenta participación en la reyerta que tuvo lugar el pasado 11 de noviembre en las inmediaciones del estadio Rico Pérez de Alicante, donde se disputó el derbi regional Hércules-Castellón del grupo III de Segunda División B. Además, se han propuesto otras multas de 6.000 euros y dos años de prohibición de acceso para otros 38 aficionados implicados en la misma pelea.