La polémica del partido del pasado fin de semana perteneciente al grupo V de Segunda Regional juvenil entre Júpiter de Massamagrell y Torrefiel ACE no ha acabado todavía. Rafa Montero, director deportivo del conjunto visitante, denunció de forma verbal tras el encuentro una agresión por parte de un grupo de aficionados de los que en todo momento aseguraba que «no representaban a ningún club» mientras intentaba abandonar acompañado por su mujer y por sus hijos las instalaciones.

La versión que hizo pública el director deportivo visitante hacía referencia a que él fue quien bajó a la media parte y al acabar el encuentro al vestuario del árbitro a comunicarle que en la grada había un fuerte «olor a marihuana y que lo hiciese constar en el acta, algo que el trencilla sí reflejó en el resumen del encuentro, si bien lo más llamativo de la redacción del acta es cómo tipifica la reacción de la hinchada, en este caso, visitante: «Al final del encuentro un gran número de personas identificadas como público del equipo visitante se me ha tirado encima cuando me dirigía al vestuario insultándome y haciéndome gestos con las manos agresivamente, donde he visto peligrar mi integridad física. Durante el transcurso de estos hechos el delegado del equipo local ha actuado perfectamente, velando por mi seguridad».

Respecto al olor a marihuana en la grada, el trencilla describe así el episodio: «Durante los últimos quince minutos de la primera parte en el campo se respiraba un fuerte olor a marihuana, se lo he comunicado al delegado del equipo local, y esos olores han cesado durante el transcurso de la segunda mitad».

El comité tiene ahora la pelota sobre su tejado y debe emitir un falló, si lo estima oportuno, respecto a los incidentes descritos en el acta del encuentro.