Los ingresos que reciben los equipos de LaLiga Santander y LaLiga 1|2|3 por parte de las televisiones suponen una buena parte de los presupuestos con los que cuentan cada temporada, suponiendo en muchos casos una diferencia brutal entre el que más cobra (FC Barcelona) y el que menos de la misma categoría (Girona y Leganés). El último pago dejó al Real Valladolid 7,1 millones de euros, al Rayo Vallecano 6,8 y a la SD Huesca 6,7, cifras que nada tendrán que ver con las que recibirán el próximo curso gracias al ejercicio 18/19 y es que aumentarán dichos ingresos en un 500% aproximadamente.

El FC Barcelona con 154 millones de euros, el Real Madrid con 148 y el Real MadridAtlético de Madrid, mientras que Sevilla FC, Athletic Club de Bilbao, Valencia CF (65,7) y Villarreal se manejan con cifras entre los 65 y los 74 kilos. El caso del Levante UD es muy llamativo, ya que la temporada pasada recibió 8,7 millones de euros (tras su paso por Segunda), mientras que la última campaña deja una subida hasta los 45,1.¿Cómo se calculan los ingresos de TV?

El 90% de los ingresos de TV se asigna a los clubes de LaLiga Santander, mientras que el 10% restante va a parar a la categoría de plata. De este montante, el 50% se distribuye a partes iguales entre todos los equipos de Primera, mientras que el resto varía según clasificación. En el caso de Segunda, el reparto queda en un 70% - 30%.

Cinco temporadas de variables

El otro 50% de lo repartido entre los equipos de LaLiga Santander depende de dos variables: un 25% para clasificación y otro para implantación social del club. Respecto a la clasificación de los últimos cinco cursos, la última temporada supondrá un 35% del mismo, mientras que la penúltima un 20%, dejando un 15% para cada una de las tres campañas restantes.

Implantación social

El 25% restante es la mencionada implantación social de cada club. ¿Cómo se mide esto? Un tercio de esta cantidad se fija en función de la recaudación media por abonos y entradas vendidas en los cinco últimos años, lo que siempre beneficiará a los equipos grandes. Los dos tercios restantes, en base a la contribución de cada club a la comercialización de las retransmisiones, lo que se traduce básicamente como las audiencias registradas en sus partidos de LaLiga en televisión.