Un nuevo Paco Alcácer. Esa es la solución para el Barcelona. Es evidente que Ernesto Valverde necesita refuerzos y siquiera él lo esconde porque cuando no están Messi o Suárez en el campo el Barcelona se convierte en un equipo con ausencia de gol. Ante el Levante, en Copa del Rey, pudo verse como sin la dupla goleadora el conjunto azulgrana pierde capacidad ofensiva.

Da igual que las alternativas sean Dembélé actuando como el '9' que no es, o que el francés esté acompañado por más de 200 millones de euros en refuerzos a sus costados. Ni Coutinho, el fichaje más caro de la historia de la entidad (160 millones) ni Malcom (41), hombres con un previsible olfato goleador, están en su mejor momento y sus registros son muy pobres para lo que se esperaba de ambos, sobre todo en el caso de Coutinho. El brasileño suma solo seis tantos entre todas las competiciones en lo que va de curso y su rendimiento suscita críticas, mientras que su compatriota, que no era del gusto del Txingurri cuando llegó, lleva solo dos dianas.

En este sentido, la figura del '9' para sustituir a Luis Suárezpreocupa y mucho en Barcelona. A sus 31 años, el uruguayo sigue marcando goles pero su condición física ya no es lo que era; y en todo caso, no va a mantener el nivel de por vida. Solo él y Leo Messi, que ha demostrado que de falso '9' también funciona aunque no es su preferencia, sostienen el gol culé, con lo que en Can Barça están rastreando el mercado en la búsqueda de un delantero centro de primer nivel con vistas al presente-futuro.

Paco Alcácer salía y cumplía. En sus dos temporadas como culé y con poco protagonismo anotó 15 goles; registros mucho mejores que los de otros como Munir o Sandro, más tiempo en la entidad que el delantero de Torrent. Y fue, precisamente, la falta de minutos y esa ambición las causas que llevaron al de Torrent a abandonar España rumbo a la Bundesliga, donde hoy asombra a toda Europa a base de goles siendo el máximo goleador de la competición con el Dortmund.

Munir, rumbo al Pizjuán

El Barça esperó hasta el final a Antoine Griezmann, y cuando éste dio portazo para quedarse en el Atlético ya era demasiado tarde. Entonces Munir se quedó para ser el refresco de Suárez, pero ante la falta de minutos va a salir. El delantero, que lleva dos goles este curso, ya no entró en la convocatoria copera y el Barça quería sacar rédito por el futbolista que acababa contrato en verano. El Sevilla abonará algo más de un millón de euros por el fichaje del hispano-marroquí.

El añorado gol desde el banquillo

Desde que Luis Suárez aterrizara en Can Barça (14/15), tres han sido los jugadores que le han dado descanso: Munir, Sandro y Alcácer. De ellos, el exvalencianista ha sido el mejor; marcó 8 y 7 goles en las dos temporadas que vistió la elástica azulgrana. efe