El jugador argentino Emiliano Sala, que se encuentra desaparecido desde el pasado lunes cuando se perdió la señal de la avioneta en la que viajaba hacia Cardiff, donde se encuentra su nuevo club, envió a un grupo de amigos de WhatsApp un audio que se ha difundido por las redes sociales. El futbolista, en tono de broma, hablaba desde el interior del aeroplano y describía su incertidumbre por la situación en la que volaban.

"Hola hemanitos, ¿cómo andan loquitos? Hermanos, estoy muerto, estuve aquí en Nantes haciendo cosas y cosas y cosas y no terminaba... Estoy acá arriba del avión, que parece que se está por caer a pedazos y me estoy yendo para Cardiff, que parece que ya mañana sí, arrancamos por la tarde. Arrancamos a entrenar con el nuevo equipo, a ver qué pasa", comentaba en el mensaje de audio el delantero.

El argentino de 28 años estuvo en Nantes despidiéndose de sus excompañeros después de haber militado un año y medio en el FC Nantes. "¿Cómo andan ustedes? Si en una hora y media no tienen novedades mías... No sé si van a mandar a alguien a buscarme porque no me van a encontrar, pero ya saben... Papá, ¡qué miedo que tengo!", prosigue el audio.

Problemas desde el despegue

El avión en el que viajaba el delantero tuvo problemas para despegar de Nantes con rumbo a Cardiff, según indicó el propio jugador a algunos de sus compañeros en mensajes enviados con su teléfono móvil.

Según revela este miércoles el diario "Ouest France", Sala envió varios mensajes a su compañero del Nantes Nicolas Pallois, que le había llevado hasta el aeropuerto, en el que le indicó que el avión había intentado despegar "tres o cinco veces" antes de lograrlo.

Los mensajes iban acompañados de emoticonos con sonrisas, según el rotativo.

Una vez en el aire, fue cuando el atacante argentino grabó el mensaje de voz que envió por "wasap" a allegados en Argentina , conversación revelada por el diario "Olé".

Durante la comida que compartió con sus antiguos compañeros del Nantes, de quienes quería despedirse para iniciar una nueva etapa en el Cardiff, Sala también bromeó con el estado en que se encontraba el aparato que el presidente de su nuevo club había puesto a su disposición para viajar a la ciudad del noroeste francés.

"Ouest France" señala que Sala había utilizado en tres ocasiones el avión, un Piper PA-46 "Malibu" matriculado en Estados Unidos.

El diario regional apunta que tres personas pasaron el control de embarque, pero que una de ellas, el experimentado piloto Dave Henderson, se quedó en tierra por motivos desconocidos hasta el momento.

Otro piloto, cuya identidad no ha trascendido, tomó los mandos del aparato y, siempre según el rotativo, pidió al control aéreo bajar de altura poco antes de que se perdiera la señal de radio, lo que puede indicar que encontró problemas con el hielo.

El avión, un monomotor de seis plazas, había despegado sobre las 20.15 horas local (19.15 GMT) del aeropuerto de Nantes y, tras una hora de vuelo, desapareció de los radares, cuando se encontraba sobre aguas de Guernesey, territorio bajo soberanía británica.

Las autoridades de esa isla lo buscan desde entonces aunque ya han asegurado que, dadas las bajas temperaturas del agua, hay pocas esperanzas de encontrar supervivientes.