El Villarreal, que viaja este martes a San Petersburgo para jugar el partido de ida de la Liga Europa contra el Zenit, ha recurrido a un avión privado de alto nivel con el objetivo de minimizar el desgaste y mejorar el descanso de los jugadores ante la cercanía del partido de Liga con el Levante.

El equipo castellonense, que afronta estos octavos de final con la idea de seguir compitiendo y hacer el mejor papel posible frente al Zenit de San Petersburgo, precisará de tres días para realizar este desplazamiento de competición europea y pretende que el desgaste sea el menor posible para sus futbolistas.

Así, para el viaje a San Petersburgo el club ha preferido adelantar en un día la salida para que los jugadores tan largo en solo dos días, por lo que el equipo ha salido este martes y regresará el jueves tras el partido.

El vuelo de casi cinco horas se hará con un avión especial y equipado para grandes trayectos en el que los futbolistas puedan descansar en el trayecto de ida y, sobre todo, en el de vuelta, con lo que los futbolistas puedan viajar tumbados y los más relajados posible, según se ha explicado desde el club.

La difícil situación del equipo en Liga hace que el Villarreal afronte el partido del jueves sin perder de vista el trascendental partido que el domingo les enfrenta al Levante en el estadio Ciutat de València y de ahí que desde el club se pretenda que los jugadores lleguen al choque liguero en las mejores condiciones posibles.