El defensa italiano del Villarreal CF, Danielle Bonera, que acaba contrato el 30 de junio, podría seguir en el organigrama del club. Tras cuatro temporadas en la entidad grogueta, su continuidad como futbolista está prácticamente descartada, pero en el Villarreal se valora su experiencia y la posibilidad de que continúe en la entidad.

Su rendimiento como jugador en la temporada que ha acabado ha sido prácticamente residual ya que, aunque en las ocasiones en las que pudo participar no lo hizo a mal nivel, sin duda ha estado lastrado por las continuas lesiones que le han impedido tener continuidad. A sus 37 años tan solo ha participado en un total de 11 partidos, cinco de ellos en LaLiga, tres en Europa League y otros tres en LaLigaEuropa LeagueCopa del Rey, una circunstancia que por momentos lastró al equipo sobre el césped ya que durante un buen tramo de la temporada, sobre todo cuando Javi Calleja apostó por jugar con tres centrales tras su regreso y no pudo contar con él.

Pese a ello el transalpino, en sus cuatro años en La Plana, se ha ganado la confianza de los distintos cuerpos técnicos e incluso de la cúpula del club, lo que ahora ha hecho que se plantee la posibilidad de contar con él ya sea en secretaría técnica, relaciones sociales o incluso cuerpo técnico como hombre de club, si bien para que su llegada en ese ámbito se haga efectiva será importante que el todavía integrante de la plantilla adopte una decisión en los próximos días sobre si quiere intentar prolongar todavía su carrera como jugador en activo o prefiere hacerse a un lado.

Calleja con los Roig

En ese sentido el proyecto 19/20 del Villarreal ya ha echado a andar con las reuniones que a lo largo de la semana pasada mantuvo Fernando Roig Negueroles con el todavía técnico, Javi Calleja. Las negociaciones para que el madrileño prorrogue su contrato —algo que ambas partes, técnico y club, han asegurado que desean que se produzca— están bien dirigidas y la muestra más evidente es que ayer, tanto él como todo su cuerpo técnico, estuvieron presentes en el partido que el filial disputó en Miralcamp en su lucha por ascender a LaLiga 1|2|3 ante el Melilla. Sin duda es un ejemplo evidente de que el técnico sigue pensando en clave de futuro en amarillo, y además estuvo muy cerca de la cúpula de la entidad que también acudió al completo a respaldar al equipo filial.

La continuidad de Calleja, unida a la de Santi Cazorla—en el caso de Cazorla técnicamente se puede prorrogar su contrato de forma unilateral, pero se va a negociar— para, a partir de ahí, avanzar en el ámbito de contrataciones y en el de diseño integral del plantel de cara al próximo curso en el que se espera no pasar tantos apuros.