El fichaje de Antoine Griezmann va a dar que hablar todavía durante todo el mes de junio. Principalmente porque hasta el 1 de julio, cuando la cláusula de rescisión del francés en el Atlético de Madrid bajará automáticamente de 200 a 120 millones de euros, no se hará efectivo el pago de esta y oficial su nuevo club. El futuro del actual campeón del mundo estará salvo sorpresa ligado al FC Barcelona, aunque los culés desmienten que haya un acuerdo cerrado desde el pasado mes de marzo como informaba este jueves 'El Larguero' de la Cadena Ser.

En el Camp Nou no niegan ya su deseo por firmar a Griezmann, quien a última hora dejó plantado al Barcelona en 2018 para renovar por el Atlético. Sí mantienen que no han pactado ni firmado contrato alguno con el delantero, a diferencia de lo que indicaba la citada información. De ser verdad esta última, el Atlético podría denunciarles, con el riesgo posterior de multa y sanción de la FIFA a los culés, por haber negociado con un jugador en contrato.

El Chelsea, interesado en Coutinho

La incorporación de Griezmann es prioritaria para el Barcelona, que trabaja para hacerle hueco en el equipo y salarialmente en la plantilla con la venta de Philippe Coutinho e incluso la de Ousmane Démbéle. Por el fichaje del brasileño, según publica este viernes el diario londinense 'Metro', el Chelsea estaría dispuesto a pagar 160 millones de euros.