Se acabó el idilio entre el exjugador del Valencia CF Adil Rami y Pamela Anderson y además de una forma traumática. La actriz estadounidense ha publicado en su cuenta de instagram un duro mensaje en el que acusa al futbolista de haberla engañado y hasta de haber recibido supuestamente presiones y amenazas.

"Es duro de aceptar. Los últimos dos años de mi vida no han sido más que mentiras. Estoy devastada por descubrir en los últimos días que él estaba viviendo una doble vida. Solía bromear sobre otros jugadores que tenían novias en apartamentos cerca de sus esposas. ¿Llamó a esos hombres monstruos? Pero esto es peor, mintió a todos. ¿Cómo es posible controlar los corazones de dos mujeres al mismo tiempo? Estoy segura de que había otras. Es un monstruo" , escribe la actriz en su cuenta personal.

Las confesiones sexuales de Pamela Anderson sobre Adil Rami

Pamela desgrana a través de diferentes mensajes las interioridades de su relación con Adil Rami y los hechos que han provocado la ruptura de su relación: "Los narcisistas nunca cambian. Los sociópatas no cambian. Esta es mi peor pesadilla. Nunca he sido celosa antes de conocerle. Ahora estoy agradecida de saber la verdad pero me duele. Me alegro de haber hablado con su ex. ¡Dios mío! Él le mintió a ella sobre todo también. Ella también está en shock y está muy triste. Es la evidencia que necesitaba para seguir adelante. Él no puede lastimarnos más. Me advirtió que todos los periódicos en Francia son amigos suyos y de sus hermanas. Ellos controlan todo, así que mi última nota está aquí en Instagram", denuncia.

También desvela Pamela Anderson lo que el futbolista hacía para conseguir el perdón: "Me iré de Francia ahora. Lo ha intentado todo... Ha enviado flores, cartas. No acepté. Se presentó a mi hotel y la seguridad se lo llevó. Tengo un guardaespaldas porque me asusta. Me ha lastimado y me amenazó muchas veces. Me siento utilizada, traicionada y herida. Pero debería haberlo sabido mejor. Los celos. La tortura física y emocional. Era todo un espejo de sus propias acciones. Intenté dejarlo diez veces y cada vez me perseguía para decir que moriría sin mí. El iría a terapia. No me haría daño otra vez. Quería que viviéramos en Malibú un día. Incluso le envié un correo electrónico a mi amigo que posee el equipo de LA para él para el próximo año, me pidió que lo hiciera".