La plantilla del Villarreal afronta este viernes el que será su quinto amistoso de pretemporada, así como el tercero y último durante su stage de trabajo preparatorio en la localidad austriaca de Bad Häring. El rival para cerrar la estadía del conjunto amarillos en los Alpes tiroleses será un Schalke 04 que, excepción hecha del Levante UD, pasa por ser el rival más potente de cuantos ha tenido el equipo dirigido por Javi Calleja hasta el momento después de acabar la pasada campaña en la décimocuarta posición de la Bundesliga.

Hasta ahora el Villarreal se ha impuesto en todos sus amistosos disputados ante West Bromwich Albion, Levante UD, Augsburgo y Colonia, y aunque en la entidad saben que ahora los resultados no son importantes, de momento a nadie le amarga un dulce y las sensaciones son mucho mejores cuando están respaldadas por los resultados.

El compromiso ante el Schalke 04 debe servir para ir testando los nuevos mecanismos y, por encima de todo, para ver por primera vez en acción con la elástica amarilla al último fichaje quien tras cinco días trabajando ya con sus nuevos compañeros está previsto que haga ya su debut oficial —ante el Colonia apenas había hecho un entrenamiento muy suave y se prefirió esperar ya que el jugador llevaba un tiempo parado tras concluir su participación con Camerún en la Copa de África—. Calleja debe tomar la decisión.

A la espera de que se incorporen Samu Chukwueze —está convocado en Miralcamp el próximo lunes— y Javi Ontiveros —su fichaje está 'cerrado' con el Málaga, pero falta que el jeque Al Thani dé su OK a las condiciones pactadas—, Calleja podrá contar con todos sus efectivos a excepción de Rubén Peña, quien está regulando las cargas de trabajo por la operación de menisco de su rodilla izquierda de finales de la pasada campaña, y Mariano Barbosa, aquejado de una lumbalgia. A ellos se unen las dudas de Manu Trigueros, que tiene molestias en el recto anterior de su pierna izquierda, y Alberto Moreno, quien en el partido ante el Colonia se retiró nuevamente con molestias en los isquiotibiales, si bien en esta ocasión fueron en la pierna izquierda y frente al West Bromwich fueron en la derecha.

Tras el encuentro de esta tarde al Villarreal, dentro de la planificación hecha, tan solo restarán dos citas más de preparación. La primera de ellas será el 7 de agosto en La Nucía frente al conjunto local, recién ascendido a Segunda División B, por lo que se presume la de menor importancia ya que apenas tres días después, el 10 de agosto a las 20:45 y apenas una semana antes de que dé inicio el campeonato liguero, el rival será el Bologna italiano en el que militan Sansone y Soriano ya en propiedad.