Yerry Mina no se lo pudo creer. El central colombiano vivió una situación incómoda en la concentración de la selección de Colombia en Miami. El exfutbolista del FC Barcelona, actualmente en el Everton, se paró ante los hinchas cafeteros y se hizo fotografías y firmó autógrafos con una sonrisa, como suele ser habitual. Pero entonces ocurrió un hecho inesperado.

Un bolígrafo, que se desconoce quién lo lanzó, impactó directamente en la cara del internacional. Su reacción fue de sorpresa y después enojo, hasta el punto de que dejó de atender en ese mismo momento a los aficionados y se fue con cara de pocos amigos.

En Colombia rápidamente corrió la noticia como la pólvora, pues a pesar de que fue un suceso sin gran importancia, mostró una reacción de Yerry Mina a la que no están nada acostumbrados los aficionados. ¿Justificada? Sin duda.