Al Barcelona le crecen los enanos. El equipo culé superó una prueba de fuego el pasado sábado ante el Celta (4-1) gracias a otra aparición salvadora de Leo Messi, pero siquiera el argentino puede evitar que las dudas y la incertidumbre en torno al proyecto de Valverde disminuyan. Más allá de la situación del equipo en la clasificación de LaLiga (colíder) y de la Champions (líder de grupo), las sensaciones sobre el juego no convencen, sobre todo tras los partidos ante el Levante (3-1) y Slavia Praga, y ya han surgido alternativas para sustituir al Txingurri durante esta temporada a la conclusión de la misma: Marcelo Gallardo (River) o Ronald Koeman (Seleccionador de Holanda).

Pero además de mejorar a nivel colectivo, Ernesto Valverde también tiene una pequeña lista de problemas individualizados con los que lidiar de este parón en adelante. Piqué, Griezmann, Dembélé, Junior, Vidal o la cantera son los distintos frentes culés abiertos.

Piqué, de futbolista a empresario

El defensa Gerard Piqué es la demostración de cómo Valverde no controla el vestuario. En una de sus recientes entrevistas para el diario El País el central afirmó que "apenas duermo cuatro o cinco horas al día porque me falta tiempo para todo".

No obstante, Piqué aseguró que ha recibido "la luz verde del club para compaginarlo todo y dedicar muchas horas a su empresa Kosmos", organizadora de la nueva Copa Davis de tenis y del control del FC Andorra. "Lo han entendido y no hay problemas. Empleo mi tiempo libre en dedicarme a lo que me gusta".

La inadaptación de los franceses

A la falta de rendimiento de Dembélé y a su falta de adaptación al estilo culé, este año se ha de añadir la potente inversión realizada por el fichaje de Griezmann y la poca sintonía que tiene con el equipo, especialmente con Messi, con quien argumentó que apenas se comunica. Entre ambos el Barcelona se ha gastado 225 euros, sin contar las variables en los últimos años. Y... de momento ninguno ha explotado.

La injustificación del fichaje de Junior

El Barcelona anunció la contratación del lateral verdiblanco Junior Firpo el pasado verano por 18 millones más 12 en variables. De momento, el suplente de Jordi Alba acumula 324 minutos repartidos en cinco encuentros de LaLiga, y ha jugado no por dar descanso al internacional, sino por obligación cuando éste se ha lesionado.

El lateral zurdo ha presionado en más de una ocasión para que le den más minutos. "Todos somos egoístas y claro que quisiera jugar más", ha dicho en alguna ocasión. "Cuando decidí venir aquí sabía a lo que estaba expuesto y estoy mentalmente preparado. No me gusta quedarme fuera de la convocatoria", ha manifestado también.

Overbooking de problemas en la medular

El último de los problemas para el técnico extremeño es la gestión del centro del campo. Allí cuenta con diversos problemas. Por un lado, y pese a que el equipo diera salida el pasado verano a jugadores como Denis Suárez o Rafinha, jugadores como Arturo Vidal e Iván Rakitic no disponen de los minutos deseados, mientras que otros como Aleñá no cuentan y otros talentos de la cantera como Riqui Puig continúan sin la oportunidad en el primer equipo.

El caso de Arturo Vidal es especial. A finales de octubre salió a la luz una entrevista realizada en su país, en la que destacaba que no estaba "contento ni feliz en Barcelona" por no ser titular. Desde entonces ha contado con más minutos. Por contra, otros como Rakitic han querido relegados al banquillo. El croata, de hecho no ha jugado los 90 minutos en ningún partido hasta la fecha esta temporada, ni en LaLiga ni en Europa. Mientras, Aleñá ni entra en las convocatorias y el club no tiene una hoja de ruta marcada sobre su futuro.