El Villarreal se encuentra a una victoria de alcanzar la que sería la trescientos en Primera División, si bien se le resiste alcanzarla después de haberse situado con 299 triunfos hace cuatro jornadas tras superar al Deportivo Alavés en el estadio de La Cerámica.
Tras golear por 4-1 al equipo vitoriano, el Villarreal acumula tres partidos en los que no ha logrado alcanzar esa cifra redonda al perder con el Eibar (2-1), empatar con el Athletic en casa (0-0) y caer en Mallorca por 3-1. De hecho, esta dificultad para llegar a la victoria trescientos es ya habitual para el Villarreal cuando se acerca a una nueva centena de partidos ganados en la máxima categoría y ya la victoria cien le costó cuatro jornadas alcanzarla, una racha que igualaría en la presente temporada si no gana al Celta.
Así, el Villarreal llegó a la victoria 99 en la jornada 13 de la campaña 06-07 tras ganar al Nástic de Tarragona por dos goles a cero en casa, pero el equipo empató antes en Vigo en la jornada 14, perdió con Osasuna por un 1-4 en la jornada 15, perdieron en Santander en la jornada 16 por 2-1 y cayó ante el Valencia en casa por 0-1 en la jornada 17 y no fue hasta la jornada 18 cuando logró esa histórica victoria 100 en competición liguera.
La victoria doscientos se hizo de rogar un poco menos pero no fue inmediata, ya que el equipo sumó la victoria 199 en la jornada 3 de la temporada 13-14, tras ganar en Pamplona por cero goles a tres, pero no pudo ganar en la jornada cuarta y quinta, en las que empató con el Real Madrid en casa y sin goles en Vigo con el Celta antes de superar el partido de la jornada 6 como local al Espanyol por 2-1.
Calendario complicado
El más sencillo de los próximos tres encuentros es el más cercano, ante el Celta de Vigo. Los gallegos llegan en descenso y en un mal momento después de otra derrota más, esta en el Camp Nou aunque con bastante honor. El Villarreal sabe que tres puntos ante los de Vigo les permitiría afrontar con mayor calma el derbi contra el Valencia y los compromisos ligueros contra Atlético de Madrid y Sevilla, este último a domicilio y ante un rival en un gran estado de forma.
