Pau Torres es el jugador de moda. El canterano 'groguet', ahora también internacional con España está de dulce. Como valor añadido, el central se ha convertido recientemente en el primer internacional absoluto nacido en Vila-real, con lo que el orgullo se ha convertido en la insignia de la escuela amarilla. El defensor, que anotó el tercero de los tantos en la goleada 7-0 a Malta a los 59 segundos, quedándose a seis del récord de Fernando Morientes (1998), está en una nube. Tras debut a las órdenes del exseleccionador Robert Moreno aseguró ayer que ha recibido «una locura de mensajes», así como que en su localidad «se vivió de una manera muy especial porque se trata de un pueblo donde todos se conocen».

«La gente de Vila-real lo vivió de manera muy especial, es normal que en un pueblo donde todos nos conocemos haya alegría cuando las cosas te van bien. Estamos muy unidos», manifestó el futbolista, que se mostró orgulloso por el hecho de que la gente de su pueblo disfrute de lo que hace.

«Tuve bastante suerte, ya que el balón me cae para rematar. Muy contento porque mi familia estaba en la grada y pudo vivirlo conmigo», aseguró Pau Torres, que añadió vivir la previa al partido «esperanzado» con poder debutar.

«Hubo un poco de cachondeo tras el gol, soy defensa, entro en el campo y marco en el primer balón que toco», confesó Torres, que aseguró que «no olvidará nunca» el momento.

Además, el zaguero contó una anécdota con su compañero Santi Cazorla antes de debutar. «Toma que con el 6 vas a hacer cositas», espetó el asturiano a Torres al darle la camiseta para que entrara al campo. «Me dio ánimos y eso me relajó», afirmó Pau. Y vaya que si lo hizo... porque no tardó ni un minuto en ser el protagonista.

Vuelta a La Cerámica

A su vez, el canterano del Submarino señaló que tras el parón de selecciones, ahora toca centrarse en el equipo y destacó la importancia de reaccionar ante el Celta en La Cerámica para conseguir los tres puntos y la victoria 300 en Primera, y mantenerse fuertes como local, tras la irregularidad mostrada a domicilio.

El Villarreal recibirá al Celta de Vigo el domingo a las 18:30 con el objetivo de romper la racha de tres partidos sin conseguir la victoria ante un rival revitalizado tras el cambio de técnico. El jugador apostó porque el equipo conseguirá mantener su fuerza como local, pero avisó de que precisan de una «reacción» ante su afición.

«En Eibar se nos escapó un punto y en Mallorca no dimos el nivel», aseguró el internacional, quien insistió en la necesidad de revertir la mala racha de resultados.

Sobre el Celta, Pau comentó que llegan en una «situación complicada», pero con «ganas de salir de ahí abajo», en referencia a la compleja situación que vive el ya exequipo del extécnico amarillo Fran Escribá.

«Ante el Barcelona se vio que han cambiado su idea de juego, tienen grandes jugadores, muchas variantes arriba y te la pueden liar», avisó el central. El cambio se debe a su nuevo entrenador, Óscar García que propone un juego más posesivo. El equipo vigués necesita, sea como sea ganar, para salir de los puestos de descenso.