El presidente de la UEFA, Aleksander Ceferin, ha dicho que el organismo rector del fútbol europeo está tratando de abordar el problema del racismo, pero reconoce que podría hacer más, añadiendo que es un tema que les preocupa y que no se limitan a "comer comida lujosa y conducir un Ferrari"

Una serie de incidentes racistas han contaminado el fútbol europeo recientemente, con el delantero italiano Mario Balotelli amenazando con salir del campo después de recibir presuntos abusos de los aficionados de Hellas Verona, mientras que el delantero brasileño del Shakhtar Donetsk, Taison, vio una tarjeta roja por reaccionar ante las burlas racistas durante un partido.

Además, el partido clasificatorio para la Eurocopa entre Inglaterra y Bulgaria en octubre se detuvo dos veces después de que los aficionados en el Estadio Levski de Sofía se burlaran de los jugadores negros visitantes con saludos nazis y cantos de monos.

"No soy tan ingenuo como para pensar que hemos hecho todo lo que podemos y ahora todo está terminado. No lo hemos hecho. Lo intentamos y nos importa. No solo somos unos tipos sentados en Nyon que comen comida lujosa y conducen un Ferrari", aclaró Ceferin en declaraciones al Daily Mirror.

El presidente agregó que la UEFA ha discutido el tema con los gobiernos europeos, pero que llevará tiempo ganar la batalla contra el racismo en el fútbol. "Fui recientemente a la Unión Europea. Hablamos con los gobiernos. Estamos tratando de hacer algo. Lleva tiempo. Requiere mucho esfuerzo y mucho debate"