Es vox populi que Zinédine Zidane y ZidaneFlorentino Pérezno tienen ahora mismo la relación más estrecha posible, es más, todo lo contrario, pasa por un momento complicado según el diario SPORT. El verano y el 'caso Pogba' no ha ayudado a que las heridas se cerraran, tampoco el hecho de que ni Eriksen o Van de Beek aterrizarán en el Bernabéu para reforzar un centro del campo casi amortizado. El gran inicio de Liga podía haber calmado las aguas, pero el horroroso inicio en la Champions League (dos partidos y ninguna victoria) con un empate incluido contra el Brujas en Chamartín ha aumentado las dudas en el presidente merengue en una competición donde la exigencia es máxima para el Madrid.

El conjunto madridista ya no tiene más margen de error en los próximos cuatro partidos que restan: los dos próximos encuentros ante el Galatasaray turco, la visita del PSG al Santiago Bernabéu y el último choque en Bélgica ante el Brujas.

Una situación inexplicable para el presidente del Real Madrid y que sitúa en el entrenador como el máximo responsable. Las consecuencias deportivas y económicas para el conjunto blanco en caso de quedarse fuera de la Champions E inconcebibles desde la máxima representación de club.

Este mensaje ya lo ha recibido el propio Zidane que tiene claro cual es la prioridad del club en las próximas semanas. LaLiga, donde ahora son líderes, pasa a un segundo escenario para tomar un protagonismo capital la Champions. Se convierte por encima de todo en la prioridad del técnico y así se lo va a transmitir a la plantilla a la vuelta de las concentraciones con sus selecciones. Aún cuando el día 26 está el Clásico ante el Barça en el Camp Nou. Mucho más importante es la visita cuatro días antes a Turquía ante el Galatasaray.

Este error imperdonable lo achacan dentro del equipo de Zidane a un "fallo técnico". A un exceso de confianza que propició una falta de intensidad que ha llevado a esta situación. Aún así dicen estar convencidos que se van a clasificar y superar esta fase de grupos.