El Villarreal no cuenta ahora mismo con los 11 millones de la opción de compra que el Olymique de Lyon tiene fijados por VillarrealToko Ekambi. Esa cantidad se pactó cuando el futbolista fue cedido al conjunto galo en el mercado invernal con una cláusula que tan solo se convertía en obligatoria si el equipo lionés se metía en competiciones europeas. Ahora mismo, con la Ligue 1 suspendida como el resto de competiciones -excepto la bielorrusa- y sin fecha de regreso definida, el equipo de Ekambi es el séptimo clasificado a nueve puntos de distancia del Lille, que es el cuarto y el que delimita en el país vecino la clasificación para competiciones continentales. Salvo sorpresa mayúscula no entrarán.

Hay dos motivos que ponen su fichaje en seria duda. Por un lado el Olympique de Lyon fue el primer club de elite europeo que anunció que aplicaría un ERTE en su plantilla como consecuencia de la coyuntura, pero también porque su situación económica no es demasiado boyante, una circunstancia que se va a ver agravada debido a la crisis del Coronavirus y al hecho, si finalmente sucede com parece previsible, de quedarse fuera de las competiciones europeas l apróxima temporada. Por el otro, el rendimiento del jugador no está siendo el esperado -el coste de la opción de compra ascendía hasta 15 millones en función de variables por obetivos individuales que en su mayoría no se están cumpliendo o no van camino de cumplirse- ya que cuando se encara el último tercio de campaña ha jugado aenas ocho partidos en liga, tres en copa y uno en Champions con apenas dos goles anotados, un bagaje paupérrimo para un futbolista que llegó en calidad de cedido a cambio de cuatro millones -solo por la cesión para media temporada, que esos sí los tiene garantizados el Villarreal- para marcar diferencias en ataque, algo que no ha hecho.Problemas para todos

Nadie escapa a una crisis que afecta al OL, pero también al propio Villarreal, que va a abrir una negociación con su plantilla para que admita una rebaja salarial que pueda paliar el impacto de la crisis. Manu Trigueros reconoció esta semana que en el caso de que no se reanude el campeonato de Liga cree que deberían «renegociar con el club y rebajar el sueldo». El futbolista aseguró que de no cobrar y no tener esos ingresos ya presupuestados, esta sería «una situación muy complicada en la que el club puede pasar por un momento muy difícil». una aspecto del que aseguró que los jugadores son conscientes.

"Si el club necesita de nuestro apoyo lo tendrá, ya que si el club no cobra ese dinero entendemos que todos debemos ser solidarios y ayudar para que se pueda mantener un equilibrio", dijo Trigueros, quien añadió que "este club es nuestra casa para la gran mayoría, ya que nos hemos criado aquí, por lo que nuestro interés es que le vaya bien y que le vaya lo mejor posible".

Respecto a la posible rebaja económica, el mediocampista apuntó que los futbolistas sabemos como está la situación y que si el club no percibe ingresos lo normal será que deban resignar una parte de su contrato. "Lo lógico es que entre todos hagamos que la situación sea lo menos complicada posible", reconoció.

Trigueros cree que esta situación se puede paliar "si se acaba jugando lo que resta de campeonato", una opción que cree que "se va a dar así, ya que hay opciones" para que acaben jugando "aunque sea cada tres días, en verano y, con o sin público". En ese sentido, Trigueros entiende que una posible reanudación de la competición tendrá que "ser diferente" a lo que están acostumbrados pero a lo que deberán adaptarse. "Debemos tener claro que esta no será una situación normal, por lo que debemos esperar cambios de cara al futuro", concluyó.

Toca vender

El Villarreal no es un equipo que suela tener problemas con el fair play financiero impuesto ni por la UEFA ni por LaLiga. De hecho, esa circunstancia le ha permitido por ejemplo acometer una operación como la de la llegada de Paco Alcácer en el último mecado invernal a cambio de 23 millones de euros. El propio Javier Tebas ha puesto al conjunto groguet como paradigma en LaLiga a la hora de cumplir con las reglas de control.

Esta temporada sin ir más lejos el equipo groguet era el sexto equipo con mayor límite salarial de LaLiga con 108 millones para gastar en sueldos tan solo precedido por Barcelona, Real Madrid, Atlético de Madrid, Sevilla y Valencia. Eso se debe a la buena gestión económica de los últimos años si bien una operación como la de Alcácer, más aún teniendo en cuenta que se acometerá algún otro refuerzo muy posiblemente. Ekambi es una de las opciones apara slir en otra dirección si finalmente no se queda en Lyon como parece, pero otros como Chukwueze, estancado tras su rutilante irrupción en el primer equipo, son opciones que pueden dejar dinero en caja.