Marcus Thuram ha sido uno de los grandes protagonistas de la jornada. Por fútbol, por juego y por una celebración que ya ha pasado a la historia. El atacante se ha arrodillado tras marcar imitando el gesto de Kaepernick, exjugador de la NFL y activista contra la segregación racial en los EEUU. El jugador del Borussia Monchengladbach se ha unido así a otra de las protestas surgidas en la Bundesliga durante este mismo fin de semana. En esta ocasión el protagonista fue McKennie, futbolista del Schalke, quien portó un brazalete en el que se podía leer 'Justice for George'.

En Estados Unidos son muchos los deportistas que están luchando por hacer más visible la lucha contra el racismo y la brutalidad policial contra la comunidad afroamericana y latina. Uno de ellos es Steve Kerr, entrenador de los Golden State Warriors. El técnico criticó las declaraciones del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, que calificó de "matones" a los manifestantes de las protestas de Mineápolis, y ha afirmado que no se debería permitir "que los racistas sean presidentes".

"En 2017, Trump llamó a los jugadores arrodillados de la NFL que protestaron pacíficamente por la brutalidad policial 'hijos de puta'. Anoche llamó a los manifestantes de Mineápolis 'matones'. Es por eso que no se debe permitir que los racistas sean presidentes", señaló en su cuenta oficial de Twitter.

Tras ello, respondió a un mensaje del vicepresidente de Estados Unidos, Mike Pence, que apeló a "la ley y el orden" y condenó "la violencia contra la propiedad o las personas", defendiendo que los ciudadanos puedan "protestar pacíficamente y dejar que se escuche su voz". "Tienes que estar bromeando. ¿Cómo tienes el descaro de decir esto?", indicó Kerr.

El asesinato del ciudadano de raza negra George Floyd en Mineápolis por parte del agente de policía Derek Chauvin ha desatado una la ola de protestas y disturbios que ha sacudido Estados Unidos en los últimos días.

Según la Fiscalía del condado de Hennepin, Chauvin mantuvo su rodilla sobre el cuello del fallecido durante ocho minutos y 46 segundos en la maniobra de detención de la víctima.

Por su parte, el extenista Yannick Noah y el delantero de Paris Saint-Germain Kylian Mbappe se han unido al grupo de deportistas que han sumado sus voces para exigir justicia por la muerte del afroamericano de 40 años George Floyd el pasado lunes en Minneapolis (Estados Unidos).

"#JusticeForGeorge" (Justicia por George) ha sido el mensaje de Mbappe en su cuenta de Twitter. Mientras, Noah ha publicado una foto en la que también exige justicia por la muerte de Floyd, durante su detención en Minneapolis por un membro de la Policía. En esa foto en Instagram, Yannick lleva una camiseta con las inscripciones "No puedo respirar", frase que Floyd gritaba mientras le aprisionaban la garganta con la rodilla, y que se ha convertido en el eslogan de los manifestantes estadounidenses que protestan por este suceso, y #JusticeForGeorgeFloyd.

El exjugador de tenis también escribió unas palabras: "¡¡¡Basta!!! No basta con no ser racistas, ¡tenemos que ser antirracistas! ¡Grítalo fuerte!.