Jurgen Klopp, pletórico tras golear de manera contundente al Crystal Palace (4-0), sabe que su equipo está muy cerca de lograr la Premier League. Si no lo consigue hoy, dependerá de sí mismo en el próximo partido. El Manchester City de Pep Guardiola debe ganar para evitar el alirón de su máximo rival frente al Chelsea, pero el técnico español, independientemente de la situación, tiene previsto hacer rotaciones para afrontar la final de Copa del domingo ante el Newcastle en plenas condiciones.

Ante la posibilidad, el entrenador alemán se tomó el permiso de bromear para darle valor a la plantilla cityzen, ya que considera que tiene un fondo de armario muy competitivo y es a lo que ellos aspiran. "¿Pep dice que va a reservar jugadores? Debería ir a jugar al póker. Nosotros somos diferentes y no podemos jugar como ellos, sólo podemos ser tan buenos como ellos y eso es lo que queremos", aseguró en Sky.