Los aficionados del FC Barcelona vuelven a estar que trinan. ¿El motivo? Una decisión arbitral que ha terminado siendo decisiva en el empate 2-2 ante el Celta.

El conjunto vigués igualó en los últimos compases con un auténtico golazo de Iago Aspas, de falta directa. El delantero celeste sorprendió con una rosca, que pasó por bajo de la barrera y tomó una curva de fuera para dentro en dirección a la portería. Ter Stegen, en modo estatua, solo pudo contemplar como el esférico ingresaba en la portería rozando la base del palo.

Pues bien, el barcelonismo piensa que la acción previa al disparo de Iago Aspas está mal arbitrada. El colegiado Cuadra Fernández señaló una falta inexistente de Piqué a Rafinha en la frontal del área. En la imagen se ve como el zaguero no tocó al exculé, que se marchó al suelo.

Con todo y tras este empate, el conjunto de Quique Setién se reubica en el liderato... pero sirve en bandeja el título liguero al Real Madrid. El cuadro blanco podría sacar dos puntos a los catalanes si mañana vence en el RCDE Stadium ante el nuevo Espanyol de Rufete. Mientras, el Celta se acerca un poco más a la salvación.