El exvalencianista Ariel 'Burrito' Ortega reconoció por primera vez sus problemas con el alcohol: "No le encuentro una explicación. Estaba peleado con la vida, con mis compañeros, con los periodistas. Hacía todo para ponerme a todos en contra, y esas son las cosas que más me duelen".

En una charla en Instagram Live, el argentino lamenta que su carrera se viese frustrada por esa adicción: "Por suerte lo pude superar, puse muchas ganas, mis hijos empezaron a crecer y puedo disfrutar la vida. Me he mandado mis cagadas, en su momento me dolían, pero no las podía manejar. Hoy al recordar creo que la podría haber pasado mejor futbolísticamente".

Ortega se retiró en 2012 después de aterrizar en 1997 en España para jugar en el Valencia CF. Paco Roig cerró entonces un traspaso histórico para el fútbol argentino al pagar por su traspaso más de 12 millones de dólares (unos 15 en euros al cambio actual).

Año y medio después, tras la limpieza de Ranieri en el vestuario, recaló en la Sampdoria. En Italia fue donde empezaron sus verdaderos problemas. Allí conoció la noche y protagonizó sonados altercados, entre ellos varias detenciones por conducir borracho. En los últimos años de su etapa como jugador fue internado en un centro de rehabilitación tras aparecer en un estado deplorable en la concentración de River Plate.