Salir vivo del Forum Romanum del Coliseum Alfonso Pérez siempre es sinónimo de positivismo, pero rascar tres puntos, con la dificultad que conlleva y con el sueño de la Champions más caliente que nunca, se convierte en un motivo para delirar de euforia. Si el Villarreal demostró que no tiene techo tras regresar del parón por la crisis del coronavirus, también confirmó que tiene capacidad para reaccionar ante los golpes. Caer frente al Barça fue un paso hacia atrás, pero vencer al Getafe supuso una inyección de moral para afrontar las batallas que restan. Pese a que la temporada ya sea un éxito, la guerra será ganada si se entra en la cuarta posición. Y para ello, el escuadrón debe ser liderado por maestros como Santi Cazorla. El asturiano desatascó un encuentro totalmente trabado. Su templanza en el verde dio esperanzas a su equipo pese a que, con el paso de los minutos, creer en la victoria solo estaba a la altura de los más creyentes. Solo tuvo que encontrar el momento idóneo, perfeccionar su técnica y asumir la responsabilidad de lanzar, nada más y nada menos, que los dos penaltis claves para la victoria. Sin embargo, llegar hasta tal estado fue una auténtica odisea.

No fue hasta la segunda mitad cuando el '8' puso la varita en el lugar idóneo. Sacó escuadra y cartabón para filtrar un pase que dejó solo a Moi, que en su intento de irse de David Soria, provocó un penalti que transformó Cazorla. La igualdad pareció decantar el resultado hacia el Villarreal, pero el Getafe es un equipo que penaliza los errores por mínimos que sean. Un servicio tenso desde la izquierda de Portillo que perfectamente cabeceado por Hugo Duro a falta de ocho minutos para la conclusión del enfrentamiento. No en vano, la filosofía de no dejar de creer impregnada por Calleja, fue suficiente para provocar una nueva pena máxima, materializada nuevamente por exfutbolista del Arsenal, ya que Portillo impactó en el tobillo de Moi Gómez al intentar cazar un balón dividido dentro del área.

Con un cuadro azulón volcado, la sentencia de Rubén Peña, que finalizó un robo en la medular tras hacer bueno un centro lateral de Gerard Moreno, sirvió para ratificar que el Villarreal es una verdadera amenaza para el Sevilla. Nueve son los puntos que restan y tres la diferencia con los andaluces. Mientras el margen de tiempo y puntuación se lo permitan, la Champions será la tierra prometida por la que suspirarán hasta el final.

Lío final y bronca en el túnel

Al término del partido, varios jugadores del Getafe se lanzaron contra el equipo arbitral sobre el césped, pero la bronca siguió en el túnel de vestuarios. No es la primera vez que el conjunto madrileño la lía de esta manera, olvidándose que son uno de los conjuntos más beneficiados por los colegiados en los últimos años al permitir un juego excesivamente duro que en muchas ocasiones supera lo reglamentario.

- Ficha técnica:

1.- Getafe: Soria; Nyom, Djené, Etxeita, Olivera; Arambarri, Timor (Hugo Duro, m. 69); Jason (Portillo, m.69), Maksimovic, Cucurella (Amath, m. 88); y Jaime Mata (Ángel, m. 57).

3.- Villarreal: Asenjo; Peña, Albiol, Pau Torres, Alberto Moreno; Iborra, Anguissa, Cazorla (Trigueros, m. 88), Ontiveros (Gaspar, m. 89); Chukwueze (Moi Gómez, m. 52) y Gerard Moreno.

Goles: 0-1, m. 66: Cazorla, de penalti; 1-1, m- 80: Hugo Duro; 1-2, m. 86: Cazorla, de penalti; 1-3, m.93: Peña.

Árbitro: Estrada Fernández (Comité Catalán). Mostró cartulina amarilla a Soria (m. 62), Ángel (m. 69) y Arambarri (m. 84) por parte del Getafe, y a Gerard Moreno (m. 90) por parte del Villarreal.

Incidencias: partido correspondiente a la trigésima quinta jornada de LaLiga Santander disputado a puerta cerrada en el Coliseum Alfonso Pérez de Getafe.