Vicente Iborra no se mueve de La Cerámica. Tanto el jugador como el propio Villarreal están en contra de separar sus caminos para que el ex del Levante emprenda una nueva aventura. El de Moncada siempre es un futbolista que despierta interés cuando las ventanas de mercado se abren, pero independientemente de su caché, no está en venta. El centrocampista y la entidad rechazaron una suculenta oferta la semana pasada procedente de Dubái, en la que ambas parten se veían beneficiadas dentro de los parámetros económicos. Sin embargo, ni una parte ni otra están por la labor de desvincular su relación contractual, además de que, con el paso del tiempo, su peso dentro del club aumenta desenfrenadamente.

La institución amarilla valora la función del medio a todos los niveles. Año y medio después de su aterrizaje procedente del Leicester, su figura dentro de La Cerámica no solo ha aportado dentro del plano futbolístico, sino también lejos del terreno de juego. Además, es una condición que llena al propio futbolista, que mientras se encuentra de vacaciones, sueña con hacer grandes gestas en clave 'grogueta', a parte de que ser valenciano, estar afincado en la Comunitat Valenciana y haber encontrado estabilidad familiar son motivos más que suficientes como para no replantearse, de manera firme, su futuro.

También, el centrocampista quiere ser partícipe de los éxitos por los que suspiran en las entrañas de la entidad. Para Unai Emery, Vicente Iborra fue un futbolista de gran incidencia mientras le dirigió en el Ramón Sánchez Pizjuán durante tres temporadas. Su ubicación habitual es la que pivote, pero bajo la mirada del de Hondarribia, sus funciones se potenciaron a través de la polivalencia. Sobre todo, desde la mediapunta. Factores que dan a entender que el '10' amarillo apunta a tener una seria relevancia en el objetivo del entrenador vasco en escalar posiciones en la tabla y asentar a la disciplina de la Plana Baixa en la disputa por sueños en forma de títulos. Algo que ilusiona, con la finalidad de afrontar un reto tan atractivo como exigente, al jugador de Moncada. En una edición en la que el Villarreal ha regresado a la Europa League después de rendir a un nivel excelente tras la reanudación de LaLiga por la crisis del coronavirus, Iborra fue determinante para cumplir la meta del club. Por ello, su papel de trascendental seguirá intacto.