Llegó el primer triunfo groguet, aunque no sin sufrimiento. Por momentos el guión del partido se asemejó peligrosamente al de hace una semana ante el Huesca, pero el Villarreal esta vez mostró poso incluso para remontar un gol de desventaja en una difícil coyuntura.

Como la semana anterior en el debut liguero, el Villarreal entró bien en el partido y la muestra más evidente es que el VAR anuló primero un penalti y después un gol de los amarillos por fuera de juego. Las decisiones fueron correctas e inevitablemente trajeron dudas, teniendo en cuenta además que en los últimos minutos del primer acto el Eibar despertó e incluso puso en apuros al conjuto groguet.

En la fiesta hispana del fútbol nipón -había tres jugadores japoneses entre el césped y los banquillos- tuvo que ser Inui quien deleitase con un excelente control de espuela y una acción en la que se plantó solo ante Asenjo, si bien por suerte para el conjunto dirigido por Emery el meta palentino consiguió abortar la mejor ocasión armera.

En ese primer acto Chukwueze, en alguna ocasión demasiado individualista, fue el más vertical de un conjunto amarillo que volvía a mostrar un inusual punto de maldad arriba con futbolistas del olfato de Gerard y Alcácer. Con la habitual defensa adelantada de Mendilibar y aunque fuese apenas por centímetros, se cayó además en exceso en la trampa del fuera de juego.

La falta de pegada amarilla se agudizó en la reanudación cuando Gerard, el autor del gol anulado para el Villarreal en el primer acto, perdonó un mano a mano ante Dmitrovic. Ya era conceder demasiado y esa acción fue el preludio de un jarro de agua fría.

Expósito envió un buen balón en profundidad tras pérdida de Coquelin que sorprendió a la zaga amarilla y Kike García, tras deshacerse de CoquelinAlbiol Tocaba remar contra la corriente y además ante un rival que anímicamente salía reforzado tras el tanto, que llegó posiblemente cuando el Villarreal más lo intentaba.

Intentó reaccionar el conjunto amarillo de forma inmediata por mediación de Coquelin, pero el disparo en posición cómoda del exvalencianista se le fue incomprensiblemente fuera del arco. Tan solo quedaba tocar zafarrancho de combate y Emery lo hizo metiendo a Estupiñán (tras apenas tres entrenamientos) y a Iborra, y fue precisamente el último refuerzo groguet quien metió un balón que Gerard Moreno

Quedaba media hora y esta vez por fin Paco Alcácer marcó y aunque inicialmente de nuevo se anuló el tanto, esta vez el VAR dijo que era en posición legal (2-1). El Villarreal había remontado e incluso pudo ampliar su renta en la recta final por mediación del fichaje Estupiñán y de un activo Kubo durante los minutos finales que le dio Emery.

Villarreal: Sergio Asenjo, Mario Gaspar, Albiol (Chakla, m.77), Pau Torres, Pedraza (Estupiñán, m.57), Chukwueze (Manu Trigueros, m.83), Coquelin (Iborra, m.57), Parejo, Moi Gómez, Paco Alcácer (Kubo, m.83) y Gerard Moreno.

Eibar: Dmitrovic, Rober Correa, Paulo Oliveira, Bigas, Rafa Soares (Kevin Rodrigues, m.82), Recio (Kadzior, m.82), Sergio Álvarez (Quique González, m.89), Expósito, Pedro León (Atienza, m.69), Kike García (Sergi Enrich, m.83) e Inui.

Goles: 0-1, m.50: Kike García. 1-1, m.63: Gerard Moreno. 2-1, m.72: Paco Alcácer.

Árbitro: Figueroa Vázquez (comité andaluz). Amonestó por el Villarreal a Coquelin y por el Eibar a Recio

Incidencias: partido disputado a puerta cerrada en La Cerámica